En este viaje de 13 días a Nueva Inglaterra (11 días completos en el destino), con inicio y final en Boston, quisimos tener una primera impresión de esta preciosa zona, recorriendo algunos de sus puntos de interés en cuatro de sus seis estados, concretamente en Massachusetts, Maine, New Hampshire y Rhode Island.
Nueva Inglaterra es el nombre de la región geográfica e histórica situada en el extremo nordeste de los Estados Unidos, limítrofe con Canadá en el norte, el océano Atlántico al este y sur, y el estado de Nueva York en el oeste. Nueva Inglaterra está formada por seis estados: Massachusetts (MA), Maine (ME), New Hampshire (NH), Rhode Island (RI), Vermont (VT) y Connecticut (CT).
El origen de su nombre está en el haber sido el lugar geográfico donde desembarcaron y establecieron sus asentamientos los primeros colonos europeos (en realidad unos peregrinos venidos de Inglaterra) en tierras norteamericanas, a partir del desembarco del famoso Mayflower, en el año 1620.
Desde entonces esta región ha sido pionera en muchos aspectos clave de la historia norteamericana. Y en la actualidad, Nueva Inglaterra es un importante centro de educación, alta tecnología, seguros, medicina y turismo. Es conocida, sobre todo, por sus universidades, ciudades históricas y monumentos y por su gran belleza natural.
Bien es verdad que decidimos el destino de este viaje casi en el último momento y esto hizo que no pudiéramos prepararlo tal como nos hubiera gustado. De hecho, teníamos una idea aproximada de la ruta a hacer, pero fue durante el viaje que fuimos concretando la ruta día a día.
Nueva Inglaterra nos gustó mucho y la recomendamos, a pesar de ser conscientes de que esta región merece bastantes más días de viaje para poder recorrer sus rincones con más tranquilidad y profundidad.
En cualquier caso esta ruta por cuatro estados de Nueva Inglaterra combina historia y cultura en ciudades y pueblos, con la belleza natural de sus paisajes o sus puentes cubiertos, sus faros, etc. Además tuvimos la suerte de coincidir con el inicio del cambio de color de las hojas en el otoño de Nueva Inglaterra, famoso en todo el país por su espectacular explosión de colores.
Del 7 al 19 de Septiembre de 2010.
Día 1: Barcelona → →
Frankfurt → →
Boston (Massachusetts)
Día 2: Boston
Día 3: Boston - Providence (Rhode Island)
Día 4: Providence - Newport - Yarmouth (Cape Cod) (Massachusetts)
Día 5: Yarmouth - ruta por Cape Cod - Falmouth
Día 6: Falmouth - Woods Hole - Martha's Vineyard - Woods Hole - Salem
Día 7: Salem - Portsmouth (New Hampshire) - Ogunquit (Maine) - Kennebunkport - Portland
Día 8: Portland - Brunswick - Freeport - North Conway (New Hampshire)
Día 9: North Conway - ruta Pinkham, Crawford y Franconia Notch Park - Lincoln
Día 10: Lincoln - Flume Gorge - ruta Kancamagus Hwy - Conway - Wolfeboro
Día 11: Wolfeboro - Laconia - Concord - Boston (Massachusetts)
Día 12: Boston → →
... (vuelo nocturno)
Día 13: ... → →
Frankfurt → →
Barcelona
La moneda oficial en los Estados Unidos es el dólar norteamericano (USD u US$). Conociendo por adelantado la gran facilidad que hay en los Estados Unidos para el pago con tarjeta de crédito nosotros optamos por llevar en efectivo sólo una cantidad limitada de dólares (unos 350 USD) para pequeños pagos o para urgencias. Todo el resto lo pagamos con tarjetas VISA y MasterCard.
Cambio medio que obtuvimos durante nuestro viaje: 1 Eur = 1'285 USD.
Ver cambio oficial actualizado en el enlace: Eur -> USD
+ 730 € (vuelo internacional Barcelona - Boston - Barcelona)
+ 137 € (50% de alquiler coche 8 días + extras)
+ 49 € (50% de gasolina, parking y peajes)
+ 467 € (50% de alojamiento)
+ 223 € (50% de comida, entradas, otras)
= 1.606 € (total por persona)
Para viajar a los Estados Unidos entonces era necesario disponer de un pasaporte de lectura mecánica y, desde comienzos de 2009, también de una Autorización Electrónica de Viaje (Electronic System for Travel Authorization o ESTA) para ciudadanos de países bajo el Programa de exención de visados, entre ellos España y Andorra (incluso los menores de edad que no pagan pasaje están obligados a obtenerla).
El visado, entonces, no era necesario para estancias inferiores a 90 días, por turismo, negocios o tránsito.
La Autorización Electrónica de Viaje se puede solicitar a través de la web ESTA en cualquier momento antes del viaje. Una vez aprobada era válida para una o más entradas en los Estados Unidos durante dos años o hasta que caduque el pasaporte del solicitante si es antes de este periodo.
Las autoridades norteamericanas recomiendan que la solicitud se presente al menos 72 horas antes de viajar, aunque puede ser cuestión sólo de minutos el obtener la aprobación vía correo electrónico.
Antes del 8 de septiembre de 2010 la obtención de esta autorización de viaje era gratuita, pero en las fechas de este viaje ya tenía un coste de 14 USD en concepto de tasa turística. El pago de esta tasa se debía hacer con tarjeta de crédito o débito como un paso más en el proceso de solicitud, no procesándose la solicitud hasta que no se recibe la información sobre el pago.
Avión: La ciudad de Boston, punto de entrada y salida del país en este viaje, cuenta con numerosas conexiones aéreas intercontinentales con Europa, por lo que se pueden conseguir buenas ofertas y precios de vuelos si se compran con bastante antelación y/o fuera de las épocas de más turismo.
En nuestro caso lo conseguimos por un precio de 730 €/pax porque lo habíamos comprado sólo 4 días antes del viaje, por lo que es posible obtenerlo por bastante menos. Después de buscar nuestra combinación óptima de vuelos (sobre todo en precio, horarios y duración del vuelo) en varios buscadores de vuelos finalmente lo compramos directamente en la web de Lufthansa.
Por otro lado, volar a Boston desde Barcelona suponía entonces una conexión en un aeropuerto europeo o norteamericano (en nuestro caso fue en el de Frankfurt).
Coche de alquiler: Para recorrer Nueva Inglaterra nosotros optamos por alquilar un coche, la opción más recomendable si se quiere exprimir al máximo el tiempo de viaje disponible y tener un grado de libertad total que permita, incluso, modificar la ruta sobre la marcha y llegar a lugares donde el transporte público es muy escaso o inexistente. Además, el relativo bajo coste del alquiler de un coche y de la gasolina en los Estados Unidos la convierten en una opción todavía más atractiva si cabe.
Nosotros alquilamos el coche a través de la web coche de alquiler y la experiencia fue muy satisfactoria. Pagamos 275 € por 8 días de alquiler de un coche compacto, con un precio base de 201 € al que sumamos un plus de 12 US$ diarios para incluir un segundo conductor, un seguro a todo riesgo y un cambio a una categoría superior.
Se nos dio a escoger entre varios modelos de la categoría intermedia y finalmente nos quedamos con un Kia Soul, un modelo urban crossover muy espacioso y automático.
Recogimos el coche en el aeropuerto de Boston, a pesar de que la oficina de la compañía de alquiler (era el mismo para el resto de compañías) no se encontraba en el mismo aeropuerto sino en los alrededores.
Fuera de la terminal tuvimos que esperar a que pasara un autobús gratuito, el cual llevaba un letrero con el nombre de la compañía de alquiler e iba recorriendo las diferentes terminales, para que nos condujera hasta el lugar donde se encuentran las diferentes compañías de alquiler (a menos de 5 minutos del aeropuerto).
Y después de 8 días de recorrer la zona con el coche, recorriendo un total de 1.904 km (1.183 millas), lo devolvimos sin novedad en una oficina del centro de Boston, lugar que escogimos por conveniencia.
En las fechas de este viaje y en la zona recorrida, el precio medio de la gasolina era de 2,723 US$/galón (unos 0,56 €/litro).
Para conducir un vehículo de alquiler en Estados Unidos no era obligatorio disponer del carnet de conducir internacional. Era suficiente con el carnet de conducir español (este fue el que tuvimos que mostrar en el momento de firmar el contrato de alquiler).
De todos modos, si disponéis del carnet de conducir internacional es mejor llevarlo, puesto que puede ser útil en caso de que os pare la policía y no entienda el español. Por otro lado, en Estados Unidos se conduce por la derecha, como en nuestro país.
Transporte urbano: Para visitar una gran ciudad, como Boston, lo más práctico y económico es hacerlo a pie y con transporte público. En Boston recomendamos el metro suburbano (MBTA Subway), con 5 líneas que cubren la mayor parte de puntos de interés para el visitante en la ciudad.
El precio del billete sencillo era entonces de 2 US$, pero hay varios tipos de bonos multi-día, a pesar de que lo más económico para una estancia de pocos días en Boston era la tarjeta recargable CharlieCard.
Finalmente, como curiosidad decir que una parte de lo que hoy es la Green Line de Boston se inauguró en 1897, siendo así la primera línea de metro en funcionamiento de Estados Unidos, y por lo que vimos al recorrerla, en algunos aspectos no había cambiado mucho desde entonces.
La hora en Nueva Inglaterra es -6 horas respecto al horario peninsular español.
En Estados Unidos la electricidad es de 120 V y 60 Hz, con un tipo de enchufe de dos clavijas planas (tipo A). Hay que llevar, pues, algún tipo de adaptador para poder enchufar nuestros aparatos eléctricos y electrónicos a la red una vez allá.
Llevar a Estados Unidos algún dispositivo electrónico (portátil, netbook, smartphone, ...) que nos permita conectarnos a Internet vía wi-fi es buena idea, puesto que es muy fácil encontrar allá espacios donde este servicio es del todo gratuito: hoteles, moteles, cafés, restaurantes, ciertos espacios públicos, ... Incluso en el ferry que hace el servicio entre Cape Cod y la isla de Martha's Vineyard hay wi-fi gratuito que permite navegar (en doble sentido) gratuitamente durante todo el trayecto.
Así tuvimos la posibilidad de buscar información, consultar el correo o reservar hoteles sobre la marcha sin la necesidad de pagar en un cibercafé o similar.
New England, de la guía USA de Lonely Planet (en inglés, 6ª ed. Marzo 2010). Capítulo en formato PDF comprado por 3,5 € en la web de Lonely Planet. El contenido estaba muy actualizado, pero echamos de menos más información (lógico, teniendo en cuenta que se trataba de un capítulo de una guía sobre todo el país norteamericano).
También encontraréis mucha información online o en papel en las Oficinas de Turismo que hay en numerosas ciudades y pueblos de la zona. Y en los hoteles y moteles también suelen tener muchos folletos informativos.
Iniciamos este viaje cogiendo un vuelo de la compañía Lufthansa de Barcelona a Frankfurt. En el momento de facturar comprobaron que, efectivamente, disponíamos de la correspondiente autorización electrónica de viaje (ESTA), sin la cual no podríamos volar a los Estados Unidos.
Después de 1 hora 45 minutos de vuelo aterrizamos en el aeropuerto de Frankfurt, tras recorrer unos 1.150 km desde Barcelona. En este gran aeropuerto de la ciudad alemana de Frankfurt nos vimos obligados a hacer una conexión ultra-rápida para coger el siguiente vuelo hacia Boston, puesto que nuestro primero vuelo había salido con mucho de retraso a causa de una huelga de controladores en Francia. Por suerte encontramos menos controles de los que suponíamos y llegamos a tiempo a la sala de embarque.
El vuelo de Frankfurt a Boston, con una duración de 7 horas y 15 minutos de vuelo y una distancia recorrida de 5.920 km, lo hicimos en un Airbus A-330 de la misma compañía. Aterrizamos en el aeropuerto Logan de Boston y después de abandonar del avión tardamos solo 5 minutos en pasar los trámites de inmigración. Cómo va siendo cada vez más habitual en los aeropuertos, también aquí nos escanearon las huellas digitales de las dos manos y nos hicieron una fotografía de la cara.
También nos hicieron algunas preguntas sobre nuestra ocupación laboral, motivo de la visita, dinero que llevábamos, etc. pero lo cierto es que nos esperábamos un interrogatorio más duro, sobre todo teniendo en cuenta los numerosos sellos de países árabes que teníamos estampados en nuestros pasaportes.
Recuperado el equipaje embarcado, salimos de la terminal, no sin pasar antes por la oficina de información turística que hay en la terminal de llegadas para obtener mapas de Boston y Massachusetts. Vimos algunas oficinas de cambio de dinero en la misma terminal, pero no cambiamos nada porque ya llevábamos algunos dólares encima.
En el exterior de la terminal buscamos el autobús blanco y azul que nos llevaría gratuitamente, en un corto trayecto de 3 minutos, hasta la estación de metro del aeropuerto, la Blue Line. Para no perder tiempo, puesto que estábamos muy cansados, compramos un billete sencillo de metro (2 US$ cada uno) para llegar hasta el hotel que ya teníamos reservado.
Desde la estación Airport de la línea azul fuimos hasta Governor Square, donde cambiamos a la línea verde en dirección a Riverside, aunque bajamos en la estación de Kenmore. En total fue un trayecto de menos de 30 minutos. Cuando salimos a la calle encontramos el hotel a menos de 100 metros de la boca del metro.
En Boston nos alojamos en el Hotel Buckminster (645 Beacon Street, Fenway Kenmore - Boston, MA), donde pagamos 106 €/noche por una habitación doble con baño privado y desayuno incluido. Disponía también de TV, nevera y microondas. El precio incluía wi-fi gratuito limitado en 90 minutos/día, aunque después de pedirlo nos proporcionaron un cable de conexión a red para poder conectarnos sin límite de tiempo.
Este histórico hotel, que cerró a causa de la pandemia de Covid-19, necesitaba algunas reformas, pero en general estaba bien. Y a pesar de que no era muy céntrico, no estaba mal situado, a sólo 100 metros de una estación de metro y junto a Fenway Park. Incluso se podía ir andando hasta el centro de Boston en un agradable paseo de 2,3 km y 30 minutos hasta el parque Boston Common.
Finalmente, hay que tener en cuenta que en Boston hay una gran oferta de alojamiento, debido sobre todo a la presencia de un gran número de universidades, pero también es una ciudad muy popular entre los visitantes, por lo cual los precios de los hoteles son bastante altos, especialmente los más céntricos y en temporada alta (de abril a junio y de septiembre a octubre). Por este motivo, si vais con un presupuesto ajustado conviene buscar y comparar alojamiento en la ciudad de Boston.
BOSTON. La ciudad de Boston es la capital y ciudad más poblada del estado de Massachusetts. Fue fundada en 1630 y actualmente es el centro cultural y de negocios de toda la región de Nueva Inglaterra.
Lugares visitados en la ciudad de Boston y alrededores:
Con el coche de alquiler iniciamos el trayecto desde Boston hacia Providence yendo hacia el sur desde los alrededores del aeropuerto Logan de Boston. Cruzamos el río Charles por el túnel subterráneo Ted Williams (peaje: 3,5 US$) y conectamos con la autopista Massachusetts Turnpike.
A partir de aquí fuimos siguiendo las indicaciones hacia el sur y conectando diferentes autopistas, como la I-90 y la I-93, hasta desembocar en la I-95 (las rutas I son carreteras interestatales).
Después de 52 km por esta carretera salimos siguiendo las indicaciones hacia el Downtown de Providence.
Llegamos al centro de Providence tras recorrer un total de 86 km desde Boston y tardamos 1 hora y 30 minutos. Poco antes de llegar a la ciudad de Providence habíamos dejado atrás el estado de Massachusetts y habíamos entrado en el de Rhode Island.
En Providence nos alojamos en el hotel Hampton Inn & Suites Providence Downtown (58 Weybosset Street - Providence, RI) donde pagamos 128 €; por una estupenda habitación doble con baño privado y desayuno incluido. También había wi-fi gratuito. Es céntrico y el hotel y la habitación estaban muy bien, a pesar de que nosotros buscábamos alguna opción no tan cara.
El parking del hotel era de pago y caro, pero en la calle, delante del hotel, había zona azul que era gratuita a partir de las 18:00 y hasta las 8:00 del día siguiente.
En Providence no habíamos reservado hotel a través de Internet y optamos por recorrer algunos hoteles del centro, pero todavía eran más caros que este, por lo que finalmente nos quedamos en el Hampton Inn. En cualquier caso habría estado mejor (menos molestias y quizás algo más barato) reservar el día antes por Internet.
PROVIDENCE. Esta ciudad es la capital y la ciudad más grande del estado de Rhode Island. Es también una de las ciudades más antiguas del país, puesto que fue fundada en el año 1636, en un territorio que estaba bajo el dominio de los indios Narragansett.
Lugares visitados en la ciudad de Providence:
NEWPORT. Esta ciudad costera perteneceal estado de Rhode Island y está situada junto a la bahía de Narragansett, a unos 53 km al sudeste de Providence.
Esta ciudad es un importante centro turístico de veraneo de Nueva Inglaterra y, de hecho, los expresidentes Dwight D. Eisenhower y John F. Kennedy tuvieron aquí su residencia estival. Newport es famosa también por sus mansiones históricas y por su rica historia en el mundo de la navegación deportiva y recreativa.
Además, fue el lugar donde se celebraron la primera edición de los torneos US Open de tenis y de golf, y aquí se llevaron a cabo todas las ediciones de la America's Cup de vela entre 1930 y 1983.
En el s. XVIII Newport fue una importante ciudad portuaria y de aquella época colonial quedan muchos edificios remarcables.
Para llegar a Newport desde Providence cogimos la I-95 hacia el sur.
A continuación seguimos por la ruta 4 hasta Kingstown, donde conectamos con la US-1 y poco después con la 138. A través del puente Jamestown Verrazzano pasamos a la isla de Jamestown y la cruzamos de oeste a este.
Al otro lado de la isla seguimos por el largo e impresionante puente colgante Claiborne Piel/Newport (peaje 4 US$) que nos llevó a la isla Aquidneck en la que se encuentra la ciudad de Newport.
Lugares visitados en la ciudad de Newport y alrededores:
El trayecto por carretera que seguimos para ir desde Newport (RI) hasta West Yarmouth (MA), donde teníamos el alojamiento reservado, era de 130 km y lo hicimos en poco más de una hora y media.
Desde Newport cogimos la ruta 138 hacia el norte y en Portsmouth (RI) conectamos con la 24. A través de un puente dejamos atrás la isla Aquidneck y después de pasar Tiverton cruzamos el límite estatal entre Rhode Island y Massachusetts y llegamos a Fall River, donde enlazamos con la I-195 hacia el este.
Tras pasar por New Bedford llegamos a West Wareham, donde conectamos con la ruta 25 hasta Sagamore. Aquí nos desviamos por la autovía 6 para cruzar hacia la península de Cape Cod a través del puente Sagamore. Unos cuántos kilómetros después salimos de la autovía 6 por la salida 72 hacia West Yarmouth, el destino final de esa jornada.
En West Yarmouth nos alojamos en el motel Econo Lodge West Yarmouth (59E Main Street, West Yarmouth, MA), donde pagamos 57 € por una habitación doble. El motel no tenía nada especial, pero la relación calidad/precio era suficientemente buena.
Junto a la recepción del motel había café y té gratuitos, además de algo para comer. Con esto y algo que habíamos comprado la noche anterior en un supermercado 7/11 cercano pudimos desayunar junto a la piscina del motel.
Para cenar fuimos hasta Hyannis Port, muy cerca del motel, donde había algunos bares y restaurantes.
CABO COD (Cape Cod en inglés). Conocida también con el nombre de The Cape, esta península está situada en el extremo oriental del estado de Massachusetts. El año 1914 se construyó el canal de Cape Cod, el cual separó el istmo del continente, pero aún se considera que Cape Cod es una península debido a la artificialidad de esta modificación. Actualmente los puentes de Sagamore y de Bourne unen Cape Cod al continente.
Cape Cod y las islas en el sur de la península, como Nantucket y Martha's Vineyard son un imán para el turismo, sobre todo durante los meses de verano, atrayendo familias acomodadas, celebridades y visitantes en general.
Esta zona también es un lugar muy codiciado para vivir después de la jubilación y más de un 31% de la población tiene 65 años o más.
Lugares visitados en la península de Cape Cod:
Tal como hemos explicado en el punto anterior, a Falmouth llegamos después de hacer una ruta circular por la península de Cape Cod en la que visitamos algunos de sus puntos de interés.
El objetivo de elegir este lugar para pernoctar fue su proximidad (5 km) a Woods Hole, el pequeño puerto de donde salen los ferrys hacia la isla de Martha's Vineyard, la cual era nuestro destino para el día siguiente a primera hora de la mañana.
En Falmouth nos alojamos en el Mariner Motel (555 Main Street, Falmouth, MA), donde pagamos 111 € por una comodísima habitación doble con baño privado y wi-fi, pero sin desayuno. El motel estaba muy bien, pero nos pareció algo caro, sobre todo comparado con el de la noche anterior en West Yarmouth.
En la misma calle del motel había un montón de tiendas, bares, restaurantes y hoteles, haciendo de esta calle un agradable paseo. Cenamos en el Liam Maguire's Irish Pub, donde comimos muy bien y además disfrutamos de música en directo.
MARTHA'S VINEYARD. La isla de Martha's Vineyard, también conocida cómo The Vineyard, está situada unos 11 km hacia el sur de la costa meridional de Cape Cod. Para llegar a ella nosotros embarcamos en un ferry que salía a las 9:30 desde Woods Hole y que llegó al embarcadero de Oak Bluff, en la isla de Martha's Vineyard, a las 10:20. El billete de ida y vuelta costaba 15 US$/pax.
Durante la época de la caza de la ballena muchos capitanes y comerciantes adinerados de Boston crearon propiedades en Martha's Vineyard con los beneficios de sus negocios.
Actualmente la isla continúa siendo un lugar de veraneo muy preciado, atrayendo numerosas celebridades. Y es un lugar tradicional de veraneo de la comunidad afrodescendiente de clase alta a causa de la larga historia de armonía racial que hay en la isla.
También ha crecido como destino turístico gracias a que su temperatura en verano difícilmente sube de los 32 °C.
De entre las muchas celebridades que viven o han visitado la isla regularmente podríamos citar los expresidentes Barack Obama i Bill Clinton, el humorista y presentador David Letterman, el músico Quincy Jones, así como Ted Danson, Larry David, Meg Ryan, Spike Lee, Dan Aykroyd o James Belushi entre muchos otros.
Por lo tanto, no debe sorprender que Martha's Vineyard, como tantos otros lugares de Nueva Angaterra, sea un lugar con un nivel de vida muy alto y donde todo, en apariencia, parece poco menos que idílico.
Para movernos por la isla compramos un pase diario de la compañía de autobuses VTA que por 7 US$/pax nos permitía subir a todos los autobuses que quisiésemos en el mismo día. Comprando el billetes individualmente, el coste era de 2 US$ por trayecto y persona.
Lugares visitados en la isla de Martha's Vineyard:
Acabada la visita a Edgartown nos hubiera gustado ir con el autobús hasta Aquinnah, en el otro extremo de la isla, para ver su paisaje marino de acantilados, pero ya no nos daba tiempo porque queríamos subir al ferry de vuelta a Woods Hole a las 15:45. Nuestra idea era llegar aquella misma tarde a Salem, donde teníamos previsto pernoctar.
Así que fuimos con el autobús desde Edgartown directamente a Oak Bluff, desde donde salía nuestro ferry. A las 15:45 el ferry salió puntualmente de Martha's Vineyard y llegó al puerto de Woods Hole a las 16:30.
Desde el puerto anduvimos los 200 metros que había hasta el punto donde habíamos dejado el coche por la mañana, en un lugar donde aparcamos gratis (en Challenger Dr), pero que nos había costado de encontrar por la mañana, sin estar seguros de si llegaríamos y encontraríamos una multa, cosa que afortunadamente no pasó. En Woods Hole todo el aparcamiento era de pago y entonces salía por unos 12 US$ el día.
Desde Woods Hole, donde habíamos dejado el coche para coger el ferry hacia Martha's Vineyard, tomamos la carretera Woods Hole Dr hasta Falmouth, donde conectamos con la autovía 28 que cruza Cape Cod en dirección norte-sur.
Cruzamos el canal de Cape Cod a través del puente Bourne y continuamos por la autovía 25 hasta West Wareham, donde cogimos la autovía 495 hasta llegar a Mansfield. Allá continuamos por la autovía 95 hacia el norte. Al llegar al Gran Boston esta autovía bordea toda su área metropolitana por el costado oeste y después continúa hacia el norte.
Ya en el norte de Boston dejamos la ruta 95 y continuamos por la autovía 128, tomando la salida 39 hacia Salem.
En Salem nos alojamos en el Hawthorne Hotel (18 Washington Square West, Salem, MA), donde pagamos 102 € por una habitación doble con baño privado y wi-fi, pero sin desayuno. El hotel estaba bastante bien. Había parking gratuito para los clientes, lo cual nos fue muy bien teniendo en cuenta que Salem es una ciudad bastante grande.
Para la cena fuimos hasta la calle Derby St, junto al puerto, y probamos la Mercy Tavern, donde comimos muy bien.
SALEM. Esta ciudad costera está situada en la costa norte del Gran Boston y ha estado habitada desde el año 1626, con la llegada de los primeros colonos ingleses.
Después se convirtió en uno de los puertos marítimos más importantes para el comercio de productos básicos de los primeros Estados Unidos. Actualmente Salem es una zona residencial y turística que acoge un gran número de puntos de interés.
Pero si por algo es conocida la ciudad de Salem es por los infames juicios por brujería que tuvieron lugar en 1692.
Lugares visitados en la ciudad de Salem:
Desde Salem hasta la ciudad de Portland, ya en el estado de Maine, hay un trayecto de unos 160 km. Nosotros aprovechamos este trayecto para hacer algunas paradas por el camino.
Salimos de Salem hacia el nordeste por la autovía 128 que va hacia Gloucester, pero antes de llegar conectamos con la 133 que va a Ipswich. Pasado Ipswich enlazamos con la carretera 1 hacia el norte.
Pasada la población de Salisbury la ruta 1 deja el estado de Massachusetts y se adentra en el de New Hampshire durante unos 27 km antes de pasar al de Maine. Este tramo es la única salida hacia el mar que tiene New Hampshire y nos sorprendió ver a lo largo de la carretera un montón de outlets y de venta de lotería.
Nos quedó claro que New Hampshire es un estado que, históricamente, tiene uno de los niveles de impuestos más bajos del país puesto que no hay un impuesto estatal para las ventas o sobre los salarios. Al parecer, muchos residentes de los estados vecinos vienen a NH a comprar.
Al llegar a Portsmouth, la última población de New Hampshire antes de cruzar a Maine, nos paramos para comer y hacer una rápida visita al centro. Después salimos de Portsmouth y conectamos con la autovía 95 hacia el norte.
Inmediatamente después cruzamos el puente Piscataqua River sobre el río Piscataqua que sirve de límite natural entre los estados de New Hampshire y Maine. Unos kilómetros más hacia el norte nos desviamos para una rápida visita a la pequeña población de Ogunquit.
Y unos 12 km más hacia el norte por la ruta 1 nos desviamos siguiendo la ruta 9 para una última parada en Kennebunkport antes de volver a la ruta 1 y continuar viaje hasta Portland, nuestro destino final.
En Portland nos alojamos en el Hotel Inn at St. John (939 Congress St, Portland, ME), donde pagamos 52 € por una habitación doble enorme con baño privado, wi-fi y un desayuno bastante completo incluido. Un auténtico chollo y la habitación estaba muy bien, pero mejor reservar una habitación interior (como hicimos nosotros con la n.º 102) o que dé al parking de detrás para evitar el ruido del tráfico de la calle. Había parking gratuito para los clientes.
Cenamos muy bien en el acogedor restaurante Vignola, en el barrio Old Port del centro de Portland, pero desgraciadamente este restaurante cerró a mediados del 2019.
PORTLAND. La ciudad de Portland (no confundir con la ciudad de igual nombre que hay en el estado de Oregón) es la ciudad más grande del estado de Maine. Actualmente su economía está basada en los servicios y en el turismo.
Lugares visitados en la ciudad de Portland y alrededores:
Old Port. Es, sin duda, la zona más interesante de la ciudad. Se trata de un barrio histórico pintoresco con calles de adoquines y bonitos edificios de ladrillos, muchos del s. XIX, con tiendas de ropa, de recuerdos y de comida gourmet.
También hay en Old Port una variada oferta de restaurantes, desde lugares elegantes de cocina americana moderna a establecimientos más tradicionales de marisco.
Paseando por la zona de Old Port encontramos la tienda Old Port Candy Co (422 Fore St, Portland, ME), un auténtico paraíso para los amantes de lo dulce y un regalo para la vista por la sinfonía de colores de los botes de golosinas y por las formas y colores de todas las variedades de fudge que están a la venta. El fudge, o dulce de azúcar, es un tipo de dulce que se hace mezclando azúcar, mantequilla y leche, con una gran variedad de sabores según lo que se le añada después: frutas, nueces, chocolate, caramelo, etc.
KENNEBUNKPORT. El centro de este pueblo costero de Maine se encuentra a lo largo del río Kennebunk. Desde hace más de un siglo Kennebunkport es un popular centro de veraneo y un destino turístico de costa. De hecho, Kennebunkport tiene la reputación de ser un refugio de verano para las clases altas y es una de las comunidades más ricas del estado de Maine.
En Kennebunkport hicimos un paseo por el centro del pueblo, alrededor de la zona de Dock Square. Después, con el coche, fuimos por Ocean Ave, una carretera que bordea la orilla del río primero y la costa después y que permite ver numerosas mansiones, a cual más espectacular!!.
En un punto junto a la carretera se encuentra el memorial Anchor to Windward en homenaje al expresidente de Estados Unidos George H. W. Bush, el padre del también expresidente George W. Bush. Y es que la familia Bush tiene una residencia de verano en Kennebunkport desde 1980. De hecho, si miráis hacia la pequeña península de Walker's Point que hay ante este memorial podréis ver la mansión de esta prominente familia.
OGUNQUIT. Se trata de un pequeño pueblo de la costa de Maine y su único interés para nosotros era ver su afamada playa. La playa de Ogunquit tiene una longitud de 5,6 km de arena blanca, la cual forma curiosas dunas.
Es un lugar fantástico para andar y sentir el agua fresca en los pies, pero es mejor hacer coincidir la visita con la marea baja para poder ver toda su extensión. Esta playa suele figurar en la lista de mejores playas de Estados Unidos.
Como que Ogunquit nos venía de paso en la ruta hacia Portland hicimos una corta parada, pero que mereció la pena.
PORTSMOUTH. Esta ciudad de New Hampshire, pero muy próxima a la frontera con Maine, fue en el pasado un importante puerto marítimo y actualmente es un popular destino turístico estival.
El motivo de nuestra parada en Portsmouth fue, sobre todo, buscar un lugar donde comer, cosa que hicimos finalmente en el restaurante Portsmouth Brewery, donde comimos muy bien y por tanto lo recomendamos.
Después de comer dimos un paseo por la zona del puerto, así como por las calles Congress St, Market St y Pleasant St. Vimos algún edificio de época interesante, pero en general no nos pareció que Portsmouth tuviera mucho interés.
Desde Portland salimos por la ruta 1 hacia el norte. Al cabo de unos 24 km nos desviamos para ir hasta South Freeport, donde comimos. Después hicimos una rápida visita a la población de Freeport, a menos de 5 km del anterior.
Desde Freeport fuimos al llamado Desierto de Maine, unos 5'5 km hacia el suroeste. Y continuamos volviendo unos kilómetros hacia el sur para conectar con la ruta 302 que va hacia el oeste. Esta carretera pasa por una zona de lagos muy bonita, entre los cuales destaca el lago Sebago. Este es un trayecto que vale mucho la pena recorrer.
Siguiendo la ruta 302 y pasada la población de Fryeburg dejamos atrás el estado de Maine y volvimos al de New Hampshire. Sobre las 18:30 llegamos a North Conway, donde teníamos previsto pernoctar.
En North Conway nos alojamos en el Golden Gables Inn (939 Congress St, Portland, ME), donde pagamos 56 € por una habitación doble muy grande con baño privado, wi-fi y parking, pero sin desayuno. Este alojamiento estaba muy bien, además de ser muy tranquilo porque tiene un edificio lejos de la carretera.
La zona de hoteles y moteles donde está el Golden Gables Inn está a unos 3'2 km del centro de North Conway, donde se encuentran los restaurantes y tiendas. Cenamos en el restaurante Horsefeathers, el cual resultó ser una buena elección.
NORTH CONWAY. Este pequeño pueblo de New Hampshire funciona como centro turístico todo el año gracias a su posición central respecto de lugares como el White Mountain National Forest, Cathedral Ledge (muy popular para la escalada), el Echo Lake State Park, o la estación de esquí Cranmore Mountain Resort, entre otros. North Conway también tiene un gran número de tiendas outlet.
Dentro del pequeño núcleo de North Conway destacamos la bonita y antigua estación de ferrocarril de North Conway, la cual fue construida en 1874 con un estilo ecléctico victoriano ruso.
Esta estación estuvo unos años abandonada después de que su línea férrea entrara en desuso, pero a mediados de 1974 fue restaurada para operar el Conway Scenic Railroad, un ferrocarril histórico que actualmente ofrece dos rutas ferroviarias históricas con fines puramente turísticos: una línea de North Conway a Conway y otra desde North Conway a Fabyan a través del paso de montaña Crawford Notch.
DESIERTO DE MAINE. Se trata de una curiosidad natural y una atracción turística, de propiedad privada, que ocupa una extensión de 16 Ha. de arena glaciar. Está ubicado unos 5,5 km hacia el suroeste de Freeport.
Fuimos hasta él porque habíamos leído algo sobro este lugar y nos pareció curioso de ver, pero cuando llegamos lo que vimos nos decepcionó mucho y no quisimos pagar los 5 US$/pax que costaba la entrada al lugar. Por lo tanto, no podemos añadir nada más sobre este lugar.
FREEPORT. Esta pequeña ciudad de Maine fue en el pasado un importante centro de la industria de la construcción naval, las explotaciones de madera y la agricultura, pero ahora es conocida por sus numerosas tiendas outlet de marcas a precios bajos. Por lo que pudimos ver eran muchos los grupos organizados de jubilados que venían desde diferentes puntos del estado o de los estados vecinos a comprar aquí.
En nuestro caso nos limitamos a pasear un rato por la calle Main St y ver las numerosas tiendas y outlets que había alrededor de esta zona, sin ningún interés especial en comprar nada.
SOUTH FREEPORT. Este pequeño pero bonito puerto marítimo está situado en la bahía de Casco, a 4.2 km hacia el sur de Freeport.
El único motivo por el que fuimos hasta South Freeport fue el probar el bogavante de Maine en el Harraseeket Lunch and Lobster, un chiringuito con mesas exteriores y que está en el puerto y junto al lugar de donde sale el ferry hacia la isla de Bustins.
Pagamos un total de 27 US$ por un menú de dos bogavantes pequeños, unas patatas fritas y unas bebidas para los dos.
Mereció la pena llegar hasta aquí porque el lugar estuvo muy bien y los bogavantes estaban riquísimos.
Para ir desde North Conway hasta Lincoln, donde queríamos alojarnos aquella noche, elegimos la ruta que pasa por la carretera US-302, la cual supone unos 90 km en total. Esta ruta norte es más larga y da más vuelta que la que va a través de la carretera NH-112, pero a lo largo del trayecto teníamos ya marcados unos cuántos puntos de interés que no nos queríamos perder.
Salimos de North Conway por la carretera 302 hacia el norte, pero enseguida nos desviamos a la izquierda para ir hasta el Echo Lake y el Echo Lake State Park, situado a 1,6 km de la carretera. Acabada esta visita volvimos a la ruta 302 y continuamos hacia el norte.
Al llegar a Glen nos desviamos por la carretera 16 hacia el norte para recorrer los 70 km de ida y vuelta de la ruta Glen-Gorham y ver algunos puntos de interés a lo largo de ella.
Continuando por la carretera US-302 cruzamos el Crawford Notch State Park, un trayecto muy bonito, y poco después pasamos por la población de Brettorn Woods.
Tras comer en un chiringuito de carretera en la zona de Bretton Woods continuamos brevemente por la US-302 y al llegar a Twin Mountain nos desviamos hacia el suroeste cogiendo la US-3, la cual también es una ruta escénica con unos paisajes espectaculares.
Unos 16 km después de Twin Mountain conectamos con la autovía I-93 en dirección sur, entrando en los límites del Franconia Notch State Park. Tras alguna parada más por el camino, finalmente llegamos a la población de Lincoln.
En Lincoln nos alojamos en el Mt Liberty Motel & Cabins (10 Liberty Road, Lincoln, NH), donde pagamos 49 US$ por una habitación doble con baño privado, sin desayuno, ubicada en la parte de motel. Este lugar nos pareció fantástico, con una relación calidad-precio buenísima.
También había una especie de cottages individuales que costaban 70 US$, pero no nos convencieron.
Este motel está a menos de 4 km del centro de Lincoln y a menos de 3 km de North Woodstock, donde hay unas cuántas opciones de restaurantes y lugares donde cenar y/o desayunar. Nuestra recomendación para el desayuno es para el excelente Arnold’s Wayside Diner (93 US-3, Lincoln, NH).
ECHO LAKE STATE PARK. Se trata de una área de recreo pública de solo 6 Ha. que incluye el lago Echo y dos paredes de roca, Cathedral Ledge y White Horse Ledge, muy populares para hacer escalada en roca y hielo.
Hay un camino de 1.6 km alrededor del lago. El entorno es muy bonito y merece la pena acercarse hasta aquí para visitarlo.
El Echo Lake State Park está situado unos 3 km al oeste de la población de North Conway.
RUTA NH-16 DE GLEN A GORHAM. Esta ruta escénica (en esta zona todas las carreteras son escénicas!!) es un tramo de 35 km entre las poblaciones de Glen y Gorham que nosotros hicimos de ida y vuelta.
El primer punto de interés que encontramos fue a la entrada de la población de Jackson, donde vimos nuestro primer puente cubierto en este viaje: el puente cubierto Honeymoon, un precioso puente de madera sobre el río Ellis que data del año 1876.
Más adelante nos detuvimos otra vez para recorrer a pie el camino Glen Ellis Falls Trailhead, un corto pero bonito camino para ver la cascada Glen Ellis.
Y 1 km más allá nos paramos nuevamente en el AMC Pinkham Notch Visitor Center, donde aparcamos el coche para hacer una de las muchas rutas a pie que salen desde aquí y que permiten disfrutar de la belleza de la región.
A lo largo de este trayecto teníamos muy buenas vistas sobre la cumbre del Mount Washington, el cual tiene una altura de 1.917 metros y es la cima más alta del nordeste de los EE.UU. Y en este trayecto vimos las primeras muestras del cambio de color otoñal de la hoja de los arces rojos.
Finalmente, al llegar a Gorham dimos la vuelta para volver por la misma ruta hasta la US-302.
CRAWFORD NOTCH STATE PARK. Este parque estatal, situado en la zona norte de New Hampshire, entre Bretton Woods y Bartlett, se extiende alrededor de Crawford Notch, un importante paso de montaña a través de las White Mountains.
Antes de entrar en los dominios de este parque nos paramos en un punto de la US-302 para ver el bonito puente cubierto Bartlett sobre el río Saco. El interior del puente estaba ocupado por una tienda de recuerdos.
En este parque nos paramos en el lugar histórico Willey House y en las cascadas y saltos de agua de Arethusa Falls, Ripley Falls y Silver Cascade. Todos este puntos se encuentran junto a la carretera NH-16 o a muy poca distancia de ella.
BRETTON WOODS. Este es el nombre de una zona que pertenece a la población de Carroll y que está prácticamente rodeada por el White Mountain National Forest.
Nuestro interés en este lugar se limitaba a ver el histórico e impresionante Hotel Mount Washington, el cual alojó en 1944 la decisiva Conferencia de Bretton Woods que estableció las bases del Fondo Monetario Internacional y del Banco Mundial.
El entorno es sencillamente precioso y el edificio del hotel es visible desde unas cuantas millas alrededor.
Para llegar al hotel desde la ruta US-302 hay que desviarse a la derecha por la carretera que va hasta The Mount Washington Cog Railway, el lugar donde se coge el tren de cremallera que sube hasta el Mount Washington. El hotel está a 1.6 km del cruce.
FRANCONIA NOTCH STATE PARK. El parque estatal Franconia Notch es una reserva natural que toma su nombre del paso de montaña Franconia Notch, sobre la I-93, entre las cordilleras de Kinsman y de Franconia, en las White Mountains. El parque se extiende desde la población de Franconia en el norte hasta Lincoln en el sur.
A menudo se dice del Franconia Notch State Park que es el mejor parque estatal de New Hampshire y uno de los mejores de los EE.UU. Sea cierto o no, bien es cierto que merece mucho la pena visitarlo.
El solo hecho de conducir a través del parque siguiendo la ruta I-93 ya es un placer por la belleza de los paisajes y sus colores, independientemente de la época del año, aunque es el otoño la que atrae más visitantes cuando el verde de las hojas se convierte en escarlata y dorado.
En el Franconia Notch State Park visitamos algunos de sus numerosos puntos de interés.
El primero de ellos fue The Basin, una cascada del río Pemigewasset que ha dado lugar a un gran oquedad en el granito de unos 6 metros de diámetro.
Y por debajo de él hay una curiosa formación rocosa llamada Old Man's Foot, también formada a causa de la fuerza erosiva del agua.
También visitamos la espectacular garganta Flume (Flume Gorge y también The Flume), que no os debéis perder si visitáis este parque. Se trata de un desfiladero natural que se extiende horizontalmente a lo largo de 240 metros en la base del Mount Liberty. Cortado por el río Flume Brook, el desfiladero presenta paredes de granito que se elevan a una altura de 21 a 27 metros y con una anchura entre paredes de 3,7 a 6,1 metros.
Aparcamos el coche en el aparcamiento del Flume Gorge Visitor Center, pagamos la entrada (13 US$ por persona) e hicimos el circuito de 3,2 km en una hora y media aproximadamente. Vale mucho la pena. Este circuito a pie pasa por el Flume Covered Bridge, un bonito puente cubierto sobre el río Pemigewasset.
KANCAMAGUS HWY. La Kancamagus Highway es el tramo de 55 km de la carretera NH-112 que hay entre las poblaciones de Lincoln y Conway, cruzando el White Mountain National Forest y subiendo hasta el Kancamagus Pass, un puerto de montaña de 870 metros de altura. Esta ruta escénica es muy popular a causa de sus vistas panorámicas y de los lugares a visitar, junto con un gran número de rutas de senderismo.
Teníamos la esperanza de poder ver un alce (moose en inglés) en esta zona, pero no tuvimos suerte. Y eso que hacía días que veíamos señales en las carreteras de New Hampshire avisando sobre la posible presencia de estos grandes cérvidos.
Por cierto, dejar el coche en cualquier aparcamiento de la Kancamagus Hwy valía entonces una tarifa plana de 3 US$ por todo un día o 5 US$ por toda la semana.
Nosotros recorrimos esta ruta escénica de oeste a este, iniciándola en Lincoln.
A lo largo del trayecto nos paramos en todos los miradores que encontramos: Hancock Overlook, Pemigewasset Overlook, C. I. Graham Wangan Overlook, Sugar Hill Overlook, etc. También nos detuvimos para ver el Lily Pond, un pequeño estanque donde se reflejan los árboles y las montañas que lo rodean, dando lugar a una imagen muy fotogénica (sobre todo con el cambio de color de las hojas).
Unos 6 km más adelante también nos detuvimos para ir a ver el salto de agua Sabbaday Falls. Desde el aparcamiento hay un camino de 1,2 km de ida y vuelta que sigue el curso del riachuelo Sabbaday Brook y que llega hasta el lugar donde está el salto de agua, bastante impresionante. Muy recomendable.
Y 10 km más allá nos paramos para ver la Rocky Gorge. Se trata de un estrecho desfiladero esculpido por los glaciares y donde el río Swift forma una serie de cascadas y rápidos sobre la garganta.
Hay un puente sobre el desfiladero que ofrece una excelente oportunidad de hacer fotos y todo ello en una zona escénica impresionante.
Siguiendo el camino unos 100 metros más allá se llega al Falls Pond, un pintoresco estanque rodeado por un denso bosque.
De vuelta a la carretera y continuando otros 3,4 km más hacia el este encontramos las cascadas Lower Falls, pero habiendo visto ya tantos saltos de agua y cascadas impresionantes los últimos días, estas cascadas no eran nada extraordinario.
Y 1 km más allá hay se encuentra el desvío de la carretera local Passaconaway Rd que cruza el río Swift a través del puente cubierto Albany.
Al llegar a la población de Conway dimos por finalizada esta extraordinaria ruta escénica por la Kancamagus Hwy.
Pero no marchéis de aquí sin ver antes un par de puentes cubiertos más, separados sólo 200 metros uno del otro hacia el norte de Conway: el Saco River Covered Bridge y el Swift River Covered Bridge.
LINCOLN. La pequeña población de Lincoln fue, en nuestro caso, el lugar donde buscamos (y encontramos) alojamiento para esa noche y que nos sirvió de base para visitar el Franconia Notch State Park.
En el límite municipal de Lincoln se encuentra el bonito puente cubierto Clark's Bridge. Este puente fue construido en 1904 en Vermont, pero en 1960 se abandonó tanto la línea del ferrocarril como el propio puente cubierto.
Ed Clark y su hermano Murray, miembros de un importante clan familiar de Lincoln, lo desmontaron de su emplazamiento original y se lo llevaron pieza a pieza hasta su lugar actual, sobre el río Pemigewasset.
Desde el año 1965 se utiliza como parte del ferrocarril de vapor de Clark, el Clark's Short Steam Railroad. Parece ser el único ejemplo de puente de ferrocarril de entramado Howe que queda en todo el mundo.
Para ir desde Lincoln hasta Wolfeboro seguimos una ruta de 124 km vía Conway, puesto que queríamos hacer la ruta escénica Kancamagus Hwy, aunque existe una ruta más corta vía Plymouth (94 km).
Desde Lincoln tomamos la NH-112 en dirección este, la popular Kancamagus Hwy, y al llegar a Conway conectamos con la ruta NH-16 hacia el sur.
En West Ossipee nos paramos a comer en un restaurante de carretera, la Hobbs Tavern & Brewing Company. Y 400 metros más adelante nos desviamos por la NH-25 que seguimos hasta llegar a la población de Moultonborough.
Pasado el aeropuerto de Moultonborough nos desviamos a la izquierda para coger la ruta escénica NH-109 en dirección sudeste y que bordea el lago Winnipesaukee por su lado norte hasta llegar a la población de Wolfeboro.
En Wolfeboro nos alojamos en el motel Crescent Lake Inn & Suites (282 S Main St, Wolfeboro, NH), donde pagamos 86 US$ por una habitación doble con baño privado y con vistas al lago Crescent. El wi-fi y el aparcamiento son gratuitos. Había café y leche gratis. Este lugar, ubicado en un lugar magnífico, tenía el nombre de The Lake Motel en las fechas de este viaje.
Para cenar fuimos al restaurante Morrisseys' Front Porch & Pub, a solo 100 metros del motel. Recomendable.
WOLFEBORO. Esta población está ubicada en la cabecera de la bahía de Wolfeboro del lago Winnipesaukee. Actualmente Wolfeboro es una popular zona de veraneo, especialmente para las familias de Boston y el sur de New Hampshire. Gente muy conocida, como el príncipe Rainiero y la princesa Grace de Mónaco, Drew Barrymore, Jimmy Fallon o el ex-presidente francés Nicolas Sarkozy han ido de vacaciones allí en un momento u otro.
Nuestra visita a Wolfeboro coincidió con un día lluvioso, aunque realmente sólo llovió a ratos.
Así que nos limitamos a pasear por S Main St, la calle principal de Wolfeboro, donde pudimos ver algunos edificios históricos como la Clark House, la Pickering House, el Brewster Memorial Hall (el Ayuntamiento), etc.
También fuimos hasta la zona del pequeño puerto del centro de Wolfeboro, donde vimos atracado el bonito barco Winnipesaukee Belle (conocido localmente como Winni Belle), una réplica de una embarcación de paletas de finales del s. XIX que hace salidas turísticas chárter en verano por diferentes áreas del lago Winnipesaukee.
RUTA DE WOLFEBORO A CONCORD. Este trayecto de 90 km nos llevó desde Wolfeboro, junto al lago Winnipesaukee, hasta Concord, la capital del estado de New Hampshire.
Salimos de Wolfeboro hacia el sur por la carretera NH-28, la cual bordea el lago Winnipesaukee por su lado oriental. Y cuando llegamos a Alton nos desviamos a la derecha por la NH-11. Esta carretera transcurre pegada a la orilla sur del lago y así hasta llegar a la pequeña ciudad de Laconia.
Aquí conectamos con la carretera US-3, la cual, a la salida de Laconia bordea el lago Winnisquam. Y al llegar a Tilton conectamos con la autovía I-93 hacia el sur. Salimos de la autovía I-93 tomando la salida hacia Concord para una corta visita a su centro histórico.
CONCORD. Esta ciudad es la capital del estado de New Hampshire, pero es solo la tercera más grande en población de todo el estado de New Hampshire después de las ciudades de Manchester y Nashua.
En Concord nosotros nos limitamos a hacer una corta visita por el centro histórico de la ciudad. La ciudad no tiene nada de extraordinario, pero si pasáis cerca de ella (como fue nuestro caso) entonces es una buena excusa para estirar las piernas y dar un paseo por su pequeño y tranquilo centro.
Nosotros aparcamos el coche en N Main St, la calle principal, y paseamos por el área donde se encuentra el edificio de la New Hampshire State House y alrededores.
La New Hampshire State House es el edificio del capitolio del estado de New Hampshire y fue construido entre 1815 y 1818.
Ante él, al otro lado de calle, se encuentra el edificio del histórico Eagle Hotel, el cual fue construido en 1851 y fue un hito local destacado desde entonces y hasta el año 1961 (fecha de su cierre), siendo un lugar de encuentro para los políticos estatales, incluyendo varios presidentes de los EE.UU.
Junto a este antiguo hotel destaca la torre del reloj de Eagle Square, la cual data de 1873. Y unos 150 metros más hacia el sur está también el histórico edificio de Phenix Hall. Y más hacia el norte, sobre la misma calle N Main St, se encuentra la Walker-Woodman House, actualmente la casa más antigua que queda en Concord, ya que fue construida entre 1733 y 1735.
Nuestro trayecto de vuelta hacia la ciudad de Boston desde Wolfeboro, con un total de 198 km, empezó con la ruta de Wolfeboro a Concord vía Laconia, la cual bordea el gran lago Winnipesaukee por sus orillas este y sur.
Y tras una corta visita al centro histórico de Concord, la capital del estado de New Hampshire, continuamos por la autovía I-93 hacia el sur durante unos 108 km hasta llegar a Boston.
Pocos kilómetros después de pasar junto al lago Canobie y antes de llegar a la ciudad de Methuen cruzamos el límite estatal, pasando de New Hampshire a Massachusetts.
Para la última noche de este viaje volvimos al mismo hotel donde nos habíamos alojado al inicio de este viaje (ver el apartado Dormir en Boston).
Después de llegar a Boston dejamos el equipaje en el hotel y devolvimos el coche de alquiler a la oficina de la compañía Alamo, puesto que en la ciudad el coche no nos era útil. Con el coche de alquiler habíamos recorrido un total de 1.184 millas (1.904 km).
Aún nos quedaba un día casi completo hasta nuestro regreso a casa, el cual aprovechamos para ver y hacer cosas en la ciudad de Boston que nos habían quedado pendientes de los primeros días de este viaje.
Desde el centro de Boston cogimos el metro (línea azul) hasta el aeropuerto Logan. Una vez allá un autobús shuttle gratuito nos llevó hasta la terminal E de donde salía nuestro vuelo hacia Frankfurt.
El vuelo de Lufthansa entre Boston y Frankfurt, en un Boeing 747-400. despegó a las 17:25. El trayecto previsto era de 5.960 km y un tiempo de 6 horas y 15 minutos. Finalmente aterrizamos en el aeropuerto de Frankfurt a las 5:45 hora local alemana (+6 horas respecto la hora en Boston).
El vuelo hacia Barcelona, también de la compañía Lufthansa, salió del aeropuerto de Frankfurt a las 8:25 y aterrizó en el aeropuerto Barcelona / El Prat a las 9:55. Fin de una nueva aventura.