La ciudad de Chicago fue fundada en 1833. Era habitada por los Potawatomi, los indígenas nativos de esta región que la nombraron Chicaugou, que significaba ciudad poderosa.
El centro es conocido como el Loop, llamado así por la confluencia de todas las líneas de metro en ruta circular.
Chicago es también la ciudad de los rascacielos, resurgida de las cenizas del incendio que en 1871 la arrasó sin piedad. También la ciudad de la arquitectura, del arte al aire libre, de la pizza gigante, de toneladas de nieve en invierno y de la vida en la calle en verano. Al Capone desarrolló aquí sus negocios.
La ciudad de Nueva York, por su parte, tuvo su origen en Manhattan, una isla que le compraron los holandeses a los indios en el año 1623 por sólo 24 US$ y a la que llamaron Nueva Amsterdam. Comerció pieles con los indios.
En el año 1674 pasó a manos inglesas, El nombre de Nueva York fue dado en honor al Duque de York.
Del sábado 11 al domingo 19 de febrero de 2017
Día 1: Llegada a Chicago y recorrido por el centro de la ciudad
Día 2: Chicago: Navy Pier, Magnificent Mile, Lincoln Zoo. Por la noche llegada a Nueva York
Día 3: Nueva York: sur de Manhattan, Estatua de la Libertad, Brooklyn
Día 4: Nueva York: Central Park, museos, Time Square
Día 5: Nueva York: 5ª Avenida, Rockefeller Center a Union Square
Día 6: Nueva York - Nueva Jersey - Nueva York
Día 7: Nueva York: Chinatown, teleférico, MOMA
Día 8: Nueva York - Chicago
Día 9: Regreso a casa desde Chicago
El viaje nos costó a los dos un total de 2.179 US$, incluyendo los tiquetes aéreos de ida y vuelta, más el vuelo de ida y vuelta entre Chicago y Nueva York, y los dos primeros hoteles que estaban pagados. Desglose de gastos diarios:
11 Febrero | US$10.50 (metro aeropuerto) US$16.50 (2 sandwiches y bebidas) US$6 (metro) US$28 (patinaje en hielo) US$3.50 (1 café) US$5.86 (6 pack cerveza) |
Total: US$76.36 |
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12 Febrero | US$6.90 (metro) US$23.30 (almuerzo) US$6 (metro al aeropuerto) US$3.50 (agua) US$19.20 (sandwiches en aeropuerto) US$70 (taxi aeropuerto-hotel) |
Total: US$128.90 |
13 Febrero | US$62 2 (Metrocard) US$14.76 (desayuno Donuts) US$1.50 (Halls) US$27.97 (almuerzo) US$2.50 (Sprite 1 litro US$4.33 (souvenir) US$18.01 (cervezas y frutas) |
Total: US$131 |
14 Febrero | US$29.03 (desayuno por peso) US$3 (Gatorade) US$1.28 (Castillo Belvedere) US$15 (Museo Historia Natural) US$23.72 (hamburguesas Shake Shark) US$11.25 (pizza) US$7.50 (six pack) |
Total: US$90.78 |
15 Febrero | US$15.20 (desayuno Donuts) US$10 (cigarro electrónico) US$36.27 (almuerzo x peso) US$10 2 (cervezas) |
Total: US$71.47 |
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16 Febrero | US$15.53 (desayuno) US$56 (tren a New Jersey) US$5.68 (bebidas y halls) |
Total: US$77.21 |
17 Febrero | US$15.85 (desayuno) US$1.25 (agua) US$36.86 (almuerzo x peso) US$17.75 (cena) US$1.75 (té frío) |
Total: US$73.46 |
18 Febrero | US$12 (Airtrain) US$3.80 (té frío) US$10 (airtrain) US$68 (hotel) US$45 (deep dish pizza) US$4.89 (2 coca-colas, 1 gatorade) |
Total: US$143.69 |
19 Febrero | US$6.23 (desayuno) US$6 (metro aero) US$30 3 (cervezas aeropuerto) US$3.37 (papas) |
Total: US$45.60 |
El avión aterrizó puntual, a las 12:40, en el aeropuerto de Chicago. Pasamos migración y seguimos a buscar la salida y tomar el metro línea azul hacia el centro de la ciudad.
Estábamos en terminal 5 del aeropuerto y de ahí tomamos un metro interno a la terminal 2. Una señora muy amable nos acompañó de la terminal 5 a la terminal 2 y nos indicó el camino.
Desde que bajamos del avión hasta tomar el metro empleamos una hora. A las 13:40 tomamos la línea azul. Para tomar el metro del aeropuerto se accede a la estación por medio de un túnel de peatones desde las terminales 1, 2 y 3. El trayecto en metro desde el aeropuerto hasta la ciudad dura 45 minutos y cuesta US$10 para dos personas.
Los tiquetes del metro se deben comprar en una máquina que no da cambio. Nosotros le depositamos US$7.5 en monedas y no recibió más monedas, por lo que le introdujimos billetes y terminamos pagando US$10.50 por el metro.
Nosotros nos hospedamos en el Chicago Getaway Hostel (616 West Airlington Place - 60614 Chicago) y para llegar a él nos bajamos en la parada de Jackson, a las 14:26, pasamos un pasadizo y cambiamos a la línea roja en dirección a Howard y bajamos en Fullerton Avenue a las 14:43, caminando hacia el este por Fullerton Avenue.
Luego se gira a la izquierda por Orchard Street, se camina una calle más y se gira a la derecha al llegar a la calle West Arlington Place, lugar donde se encuentra el hostel, a mano izquierda. Llegamos a él a las 14:57.
• la Deep-dish pizza en Lou Malnati's, Giordano's, Gino's East, o la Pizzería Uno
• los Hot Dogs al estilo Chicago.
• un café: US$2.20
• una botella 33 cl. de agua: US$1.37
• una botella 1.5 lt. de agua: US$1.75
• una cerveza: US$4 en restaurante y US$1.87 en un súper
• una comida en un local popular: US$12
• un menú en un McDonald's: US$7
• una cena en un restaurante de nivel: US$50 para dos personas.
Por una noche por los dos nos cobraron US$41.22 (lo pagamos al hacer la reserva). Este hotel tiene desayuno, recepción 24 horas y guardaequipaje.
Salimos del hotel, primero a almorzar unos sandwiches de spicy italian y dos bebidas en Subway por US$16.50.
Luego tomamos el metro en Fullerton (US$6 por los 2).
En el metro de Chicago (CTA) las tarifas para un billete sencillo cuesta US$3, mientras que un pase para un día cuesta US$10 (válido para buses, trenes y metro).
Los pases se pueden adquirir online a través de la web de la CTA, en las máquinas de venta de billetes, en determinadas casas de cambio, en los mercados Jewel y Dominick, y en tiendas de conveniencia CVS y Walgreens.
A continuación enumeramos las actividades planificadas para el día de hoy:
• Elevated Train. Se trata de la línea de metro marrón, la L, conocida como elevated, y que como su propio nombre indica, circula por vías elevadas en pleno centro de la ciudad, por lo que da una visión única de Chicago. Además, durante el frío invierno, es ideal para los recorridos dentro del Loop.
• Grant Park. Son 120 hectáreas repletas de atractivos: Millennium Park, Maggie Daley Park, Instituto de Arte, Museo Campus, Buckingham Fountain.
a) El Millennium Park ha pasado a ser en los últimos años la principal atracción turística de Chicago y una de las más importantes de EE.UU. En este parque destacamos:
• Millennium Monument. Se trata de una réplica a tamaño casi real del peristilo de un templo romano de columnas de estilo dórico.
• Cloud Gate (conocido popularmente como The Bean). Diseñado a modo de espejo curvo gigante que refleja en su estructura el skyline de la ciudad.
• Jay Pritzker Pavilion (Pabellón Pritzker), un espectacular auditorio al aire libre, diseñado por Frank Gehry, que alberga algunos de los más interesantes festivales de la costa este.
• Crown Fountain. Fuente formada por dos torres de vidrio de 15 metros de altura donde se proyectan fotos de habitantes de Chicago, mientras que el agua sale de sus bocas.
• Pista de Patinaje McCormick Tribune, para patinar disfrutando de vistas sobre el skyline de Chicago. El uso de la pista es gratuito y el alquiler de patines cuesta US$24 para dos personas, sin límite de tiempo.
Sólo funciona en invierno, si el tiempo lo permite.
• BP Bridge, diseñado también por Frank Gehry. Este puente conecta Millennium Park y Maggie Daley Park.
b) Maggie Daley Park. Este novísimo parque cuenta con columpios, paredes de escalada y, en invierno, con una pista de patinaje sobre hielo llamada Skating Ribbon.
c) The Art Institute of Chicago. Se dice que está entre los mejores tres museos del mundo y aloja la tercera colección de arte de EE.UU. Su fachada está flanqueada por dos leones de bronce. Se inauguró en 1893 y es reconocido por su amplia colección impresionista.
d) Buckingham Fountain. Es un símbolo por ser el punto de partida de la histórica Ruta 66.
e) Museum Campus. Alberga el Field Museum, el Shedd Aquarium, el Adler Planetarium (el primero de EE.UU.) y el Soldier Field. Cuenta con unas increíbles vistas del skyline de Chicago. Aunque no tengas interés en visitar los museos es recomendable visitar los alrededores e hipnotizarse con las vistas.
• Theatre District. La ciudad cuenta con más de 200 teatros y esta zona está ubicada en pleno centro del Loop. Aquí encontraréis los teatros más conocidos de la ciudad, al menos desde el punto de vista turístico, como el Chicago Theatre o el Goodman Theatre, el teatro sin ánimo de lucro más antiguo y grande de Chicago, entre otros. Sin duda, el paseo por la zona es recomendable hacerlo por la noche, cuando sus luces inundan las calles.
Cómo llegamos tan tarde al centro de Chicago, obviamente no nos dio tiempo de realizar todas las actividades planificadas. Lo que hicimos ese día fue tomar el metro en Fullerton y nos pasamos a la línea L sin salir del metro, le dimos la vuelta al centro y nos bajamos cerca de Millenium Park.
Recorriendo ese parque conocimos el Millennium Monument, la Cloud Gate, el Jay Pritzker Pavilion, la pista de patinaje de Millenium Park, el BP Bridge, o el Maggie Daley Park, donde patinamos por US$28 los dos.
Durante el patinaje nos compramos un café por US$3.50. Al terminar de patinar caminamos por el Theatre District y compramos un six pack de cervezas por US$5,86 y luego tomamos el metro de regreso al hostel (US$6).
Este día nos levantamos a las 6:00. El desayuno empezaba a las 7:00 y desayunamos wafflets con café y una manzana. Después salimos a aprovechar la mañana, ya que teníamos sólo hasta las 14:00 para recorrer Chicago anter de emprender el viaje a Nueva York.
El metro nos costó US$6.90. La máquina se pegó y no recibió más monedas, le tuvimos que introducir billetes. Nos bajamos cerca de Navy Pier.
Fuimos a Navy Pier, un centro lúdico con mucha actividad durante el verano, en invierno casi todo está cerrado. Tiene buenas vistas del lago Michigan y a veces esculturas de hielo.
Luego caminamos por la orilla del lago Michigan y nos desviamos para conocer la Magnificent Mile, que es la milla magnífica, la principal calle de compras de la ciudad, poblada por las más reconocidas firmas del mercado. Se extiende desde North Michigan Avenue hasta la calle Oak desde el río.
Para quienes vayan a la caza de compras más baratas, las tiendas más económicas están a lo largo de State Street, en el Loop. En cuanto a centros comerciales, son numerosos por todo el centro de Chicago. Son recomendables el Macys y el Water Tower Place.
Pasamos por la torre John Hancock Center, la cual tiene buenas vistas de la ciudad. Con una altura de 344 metros, en lo alto del edificio está el observatorio 360 Chicago, ubicado en el piso 94. La entrada cuesta US$20 por persona.
Otra opción es subir al restaurante The Signature Lounge, dos pisos encima. No se paga entrada y no es caro para el sitio que es y las vistas que ofrece. Por ejemplo, una cerveza cuesta alrededor de US$10 y un coctel US$15. Desde el lavabo de mujeres hay unas vistas increibles.
Nosotros no entramos al observatorio, intentamos entrar al restaurante, pero era muy temprano y estaba cerrado.
Posteriormente, seguimos por la orilla del lago Michigan hasta llegar al Lincoln Park y visitar el Lincoln Zoo, fundado en 1868. Se emplean como dos horas en el recorrido por el zoo.
Supuestamente la entrada al zoo es gratis para una visita de menos de 30 minutos. Más de 30 minutos cuesta US$25 por persona. Sin embargo, el día que fuimos la entrada estaba abierta gratis.
Este zoológico tiene gorilas, osos polares, rinocerontes, pingüinos, camellos, águilas, hipopótamos, canguros rojos, etc. El zoo abre a las 7:00. Nosotros almorzamos ahí por US$23.30.
Luego caminamos hasta el hostal, que se encuentra a 10 minutos del zoológico, para recoger las maletas y nos fuimos al aeropuerto. Tomamos el metro en Fullerton Avenue (US$6), nos bajamos en Jackson y de ahí cambiamos a la línea azul. Cuando llegamos al aeropuerto nos dirigimos a terminal 3 de donde sale el vuelo de la aerolínea Jetblue.
Nuestro vuelo salía del aeropuerto O'hare de Chicago a las 17:59 y debía aterrizar en ela eropuerto JFK de Nueva York a las 21:13, pero en Nueva York había una tormenta de nieve y el vuelo se retrasó casi dos horas. Terminamos saliendo de Chicago a las 20:02. Cenamos en el aeropuerto de Chicago unos sandwiches y bebidas por US$19.20.
En el aeropuerto de Chicago conocimos una muchacha que nos indicó que en Nueva York mejor tomáramos un taxi hacia el hotel. Cuando aterrizamos en el aeropuerto John Fitzgerald Kennedy de NY, a las 23:00, el esposo nos llamó un taxi, pero esperamos como 45 minutos y no apareció el taxista, por lo que tomamos otro hacia el hotel, que nos cobró US$70.
Por fin, a las 00:15 llegamos a nuestro hotel, hicimos el check in y nos fuimos a dormir después de un largo día. A descansar, porque al día siguiente una nueva aventura comenzaba en Nueva York.
En Nueva York dormimos en el Broadway hotel & Hostel (230 West 101 Street, Upper West Side, Nueva York). Por seis noches pagamos US$408,84. Está cerca del Central Park.
Por ser tan tarde tomamos un taxi, pero para ir del aeropuerto al hotel se puede tomar el AirTrain (US$10 por dos personas) y luego el metro hasta la estación Jamaica. Ahí se puede comprar el bono MetroCard y hacer transbordo hacia línea E. El cambio a línea 1 roja puede ser en 50 St1 o en 50 St C-E. Tomar la línea C y en 59 St Columbus Circle cambiar a línea 1 y bajar en 103 St.
Hay que dejar un 15% más o menos, como mínimo, para un servicio normal o un 20% para uno más que excelente.
Si no aclaras previamente lo que vas a dejar te puedes encontrar con que al pagar con la tarjeta te plantan un 20% adicional por concepto service o tip.
Para las copas, más o menos, un euro por cada una. Por supuesto para lugares de comida rápida, donde tú te llevas tu alimento etc, no es necesario dejar propinas.
La tarjeta Metrocard de 7 días permite viajes ilimitados en autobuses, metro y el teleférico de Roosvelt para ese período. La tarjeta sólo sirve para que viaje una persona. Nosotros compramos dos tarjetas por US$62.
Las tarjetas turísticas New York Pass o New York CityPASS permiten ver museos y subir a miradores a precios reducidos.
Las opciones son ilimitadas: pizzas, hamburguesas, hot dog, delis, puestos callejeros, comida gourmet de todo tipo, etc.
Alguna comida típica: diván de pollo, ensalada del chef, ...
Algunos lugares:
• Gray's Papaya: hot dog baratos
• Whole Foods: super con comida ecológica que se vende a peso
• Deli (abreviatura de Delicatessen): pequeños super con una barra para comer, muy usado por los neoyorquinos. Son lugares perfectos para comer bien y barato, y con mucha variedad de comida. Lo mejor de estos Deli es la parte buffet, con comida caliente las 24h del día que te pones en unas cajetillas y te la cobran a peso. Se dice que una caja llena de comida no suele costar más de US$8. No obstante, nosotros cada vez que compramos comida en un Deli pagamos más de US$30 por los dos, incluyendo las bebidas. Usualmente le poníamos a la caja lo que nos parecía más rico. Además se puede comer en el local o llevar la comida y comer en algún parque, como un newyorker más.
• Carros de comida callejera (food trucks). Los hay casi en cada esquina de Nueva York, con combos a partir de US$4-5. En hora punta del lunch se forman largas colas. Sirven desde kebabs a comida india, de oriente próximo, o tacos y burritos mexicanos. Un perrito caliente cuesta 1,50 US$; un pretzel (especie de rosca de pan con sal) vale unos 2 US$; y una porción de pizza a partir de 2 US$ la porción. Nosotros vimos varios carritos de comida, pero no optamos por esta opción.
Comenzando el día nos levantamos a las 7:30, tras el día anterior tan agotador que habíamos tenido.
Pasamos a la recepción del hotel y compramos dos tarjetas MetroCard por US$62.
Uno de los propósitos del viaje era ver una nevada y al salir del hotel tuvimos una agradable sorpresa, había una ligera nevada.
Pasamos a desayunar en un Dunkin'Donuts dos cafés y dos sándwiches por US$14.76.
Luego tomamos el metro hasta la última parada de la línea roja. Salimos y caminamos a la estación del ferry a Staten Island.
El ferry a Staten Island, de color naranja, es gratuito. El trayecto desde Manhattan a Staten Island dura 20 minutos y permite tener unas buenas vistas, tanto de la estatua de la Libertad como de Manhattan desde el otro lado.
Para coger el ferry hay que ir a la estación de metro Bowling Green (líneas 4 y 5) o Whitehall Street (N y R). Enfrente está la estación de ferry. Para tener buenas vistas a la ida poneros en el lado derecho y a la vuelta en el izquierdo.
El ferry pasa cerca de la Estatua de la Libertad, un regalo de Francia por el 100 aniversario de Estados Unidos. Se terminó en 1884 y fue inaugurada en 1886. Mide 46 metros de alto y representa la diosa de la libertad.
Sostiene una antorcha y una tabla, donde se puede ver la fecha de la independencia de EE.UU,. el 4 de julio de 1776.
Luego, de regreso a Manhattan, caminamos hacia Battery Island y luego hacia el Charging Bull (Wall Street Bull), una escultura de bronce que pesa 3.200 kg y que simboliza el optimismo, la agresividad y la prosperidad financiera.
Seguimos hacia Trinity Church, una iglesia de confesión episcopal anglicana, de 1846.
En la calle de enfrente está Wall Street y al bajar por ella está el edificio de 1817 de la New York Stock Exchange, el mayor mercado de valores del mundo.
De ahí tomamos el metro hacia Century 21, en el nº 22 de Cortlandt St. Se trata de un centro comercial donde se puede comprar ropa de marca a muy buen precio. Y en la planta de abajo hay los típicos recuerdos de Nueva York.
Al salir, ya era hora de almorzar. Compramos sushi (US$11.97), pizza y bebidas (US$16). Nos sentamos a comer en Zuccotti Park.
Luego fuimos hasta el World Trade Center, en la conocida como Zona Cero.
Fue un complejo de edificios en el Bajo Manhattan, que incluía a las emblemáticas Torres Gemelas, inauguradas el 4 de abril de 1973 y destruidas el 11 de septiembre de 2001, junto con el World Trade Center 7. Los otros edificios que formaban el complejo fueron dañados en el ataque y sus restos fueron posteriormente demolidos.
En su lugar se ha levantado el One World Trade Center, el rascacielos más alto del hemisferio occidental y el sexto del mundo.
También el 9/11 Memorial, de acceso gratuito. Los baños o sanitarios más convenientes están en la capilla de St. Paul, antes de proceder a la entrada del monumento.
Continuamos hacia el New York City Hall, el ayuntamiento de Nueva York, situado en un edificio de 1803. Es el edificio de Ayuntamiento más antiguo de EE.UU.
Desde ahí sale el camino hacia el Brooklyn Bridge, el cual une los distritos de Manhattan y de Brooklyn. Fue construido entre 1870 y 1883. En el momento de su inauguración fue el puente colgante más grande del mundo.
Este paseo por el puente de Brooklyn no es muy largo, algo menos de 2 km, pero merece la pena cada minuto del mismo. Ha salido decenas de veces en películas. Desde el puente se tienen buenas vistas de Manhattan.
Nosotros, al llegar al otro lado del puente, ya en Brooklyn, decidimos regresar al hotel. Ya era de noche y estábamos cansados, pero podíamos haber continuado hacia el Brooklyn Bridge Park, también conocido comp parque DUMBO (acrónimo de Down Under the Manhattan Bridge Overpass), un parque con muy buenas vistas del skyline de Manhattan y también para descansar de la caminata.
De regreso al hotel pasamos a por unas cervezas y algo de comer (US$18.01).
El día de los enamorados nos levantamos temprano y nos fuimos caminando hacia Central Park.
Uno no puede dejar de imaginarse los numerosos clásicos cinematrográficos en los que aparece este parque, contruido entre 1858 y 1873. Hay que tener en cuenta que las dimensiones de este parque urbano, 340 hectáreas, equivalen a dos veces el país de Mónaco.
A finales de Octubre, todos los años, dos pistas de hielo para patinar abren en el parque. Al norte encontrarás la pista de hielo Lasker, que da a Harlem Meer. En el sur de Central Park está la pista de hielo Wollman, la más conocida de las dos, puesto que se encuentra cerca de Midtown Manhattan y ofrece unas fantásticas vistas de los rascacielos de esa zona Además ha salido en películas como Serendipity y Sin límites.
De camino a Central Park desayunamos, comprando comida a peso por US$26.31 y un café por US$2,72.
Al llegar a él tomamos un bus que nos cruza al otro lado del parque, ya que se recomienda empezar la ruta en la calle 96th con la 5th Ave.
Caminamos bordeando el lago más grande del parque, el Jacqueline Kennedy Onassis Reservoir. Pasear por el camino del lago paralelo a la 5th avenida hasta encontraros con el Metropolitan Museum of Art, también conocido con MET. Se dice de este museo, inaugurado en 1872, que es de los mejores del mundo. Abre a las 9:30 y los lunes está cerrado. El precio sugerido por persona es de US$25, pero no es obligatorio ese monto. Entrada por la 5ª avenida. Lo mejor del museo es el templo egipcio y subir a la terraza en el tejado para las vistas de Central Park.
Nosotros no entramos al MET y seguimos hacia el Castillo Belvedere, construido en 1865 y de estilo victoriano. Abre a las 10:00 y la entrada es gratis, aunque se pide una contribución voluntaria. Nosotros dimos US$1.28 por los dos. Recorrido rápido con buenas vistas. Es la sede del observatorio meteorológico.
Luego caminamos por la orilla de The Lake, donde se encuentra el romántico restaurante Loeb Boat House, para bolsillos pudientes, y una caseta donde se pueden alquilar barcas para recorrer el lago en verano. También el puente romántico Bow Bridge.
Seguimos hacia el Memorial Strawberry Fields, en memoria de John Lennon y que toma el nombre de una conocida canción de The Beatles. A esa misma altura, saliendo del parque, está el edificio Dakota, en el nº 1 de West 72th St. En él se filmó la película Los Cazafantasmas y aquí vivía John Lennon con Yoko Ono cuando fue asesinado en las proximidades el 8 de Diciembre de 1980.
Luego caminamos hacia el American Museum of Natural History, inaugurado en 1869. Abre de 10:00 a 17:45h y la entrada vale US$22 por persona, aunque no es un monto obligatorio (nosotros dimos US$15 por los dos).
Está considerado como uno de los mejores museos de ciencia en el mundo. Su exposición hace una repaso a la historia de la Tierra y del hombre. Su colección está compuesta por más de 35 millones de objetos, considerada como la más amplia del mundo. Se necesitan tres horas para recorrerlo.
Entre las salas en las que más merece la pena detenerse se encuentran la de la biodiversidad (con cientos de animales disecados), animales del océano, África, la del universo, minerales y meteoritos y muy especialmente, la de los dinosaurios, con fósiles y reproducciones a tamaño natural.
Este museo es el principal escenario de la comedia estadounidense Una noche en el museo.
Saliendo del museo ya era tiempo de almorzar. Lo hicimos en Shake Shark: dos hamburguesas con papas y refresco por US$23,72. Luego regresamos al Central Park, a tomar un descanso.
Continuamos el recorrido pasando por una pista de patinaje y por la Explanada Sheep Meadow, una pradera para descansar en verano, la cual ha salido también en varias películas.
Seguimos hasta llegar al Hotel Plaza y a la Apple Store cercana, donde había muchas personas comprando. Cerca está la tienda FAO, donde se puede subir a ver el piano gigante de la película Big.
Tomamos el metro en la esquina de Central Park y nos fuimos a Time Square, situado en una intersección de Manhattan. Este lugar recibió su nombre actual por las oficinas del diario The New York Times, que se encontraban en el edificio One Times Square. Aquí están las famosas escaleras rojas. Las tiendas de esta zona abren 24 horas. Habían muchos turistas y personas vendiendo tiquetes y otros vestidos de super amigos y personajes de Disney.
Regresamos al hotel y pasamos a por una pizza (US$11,25) y un six pack de cervezas (US$7,50).
Para este día nos levantamos un poco más tarde de lo normal y desayunamos cerca del hotel (US$15,20).
Nos fuimos en metro al Rockefeller Center, un complejo de 19 edificios comerciales que cubre una superficie de 22 acres entre las calles 48 y 51. En esta plaza se instala en invierno la famosa pista de hielo.
Uno de los rascacielos de este complejo es el Edificio Comcast, también conocido como 30 Rock, el cual permite disfrutar de espectaculares vistas desde el observatorio Top of the Rock, situado en su terraza superior.
Si hay que elegir entre subir al Top of the Rock o el Empire State, recomiendan la primera opción, ya que desde este edificio del Rockefeller Center se ve todo Central Park y el propio Empire State. La entrada es en 50th St, entre las avenidas 5 y 6. Abre a las 8:00. La entrada cuesta US$32 por persona. Nosotros decidimos no entrar.
La 5ª Avenida es la arteria más importante de Manhattan. Comienza a la altura de la calle 8th y sube hasta Harlem. Entre las calles 49th y 60th es donde se encuentra la mayor concentración de tiendas, siendo considerada como una de las calles comerciales más caras del mundo. También es conocida por tener los alquileres medios más caros del mundo. Por ello, no es casualidad que series como Gossip Girl sean rodadas alrededor de la 5ª avenida, a la altura del Upper East Side.
Seguimos para conocer la St. Patrick’s Cathedral. Justo a la altura del Rockefeller Center tenemos esta majestuosa catedral entre rascacielos, que además se puede visitar por dentro y gratis. Es la catedral católica de estilo neogótico más grande de América del Norte. Su construcción concluyó en 1879.
Caminamos hacia la Grand Central Station y el Chrysler Building. Para llegar a ellos tenemos que desviarnos por 42nd St e ir hacia Park Avenue, a solo dos bloques. Por el camino ya empezaréis a verlos.
Dentro de la Grand Central Station buscar la Galería Susurros. Es la estación de trenes más grande del mundo en número de andenes. Aquí se filmaron películas como El rey pescador, Olvidate de mí, Los vengadores, Soy Leyenda.
El edificio Chrysler, por su parte, es el edificio de ladrillo más alto del mundo.
Después fuimos a la Public Library y al Bryan Park. La biblioteca data del año 1895 y merece la pena visitarla por dentro. En ella se filmó la película El día después de mañana.
Justo detrás queda Bryant Park, construido en 1843, un parque donde tomar algo antes de seguir la marcha. Es un jardín a la francesa. Para el almuerzo compramos comida en un deli cercano (US$36.27) y almorzamos en este parque.
Más tarde fuimos al Empire State. Su nombre deriva del apodo del Estado de Nueva York. Fue el edificio más alto del mundo durante más de cuarenta años, desde su finalización en 1931 hasta 1972.
El solar que ocupa el edificio se desarrolló por primera vez como la Granja de John Thomson, a finales del siglo XVIII.
Es una de las Siete Maravillas del mundo moderno. Su altura total llega a los 443 metros, con 102 plantas. En él se filmó King Kong, Independence Day u Oblivion.
Está abierto de 8 de la mañana a las 2 de la madrugada. Para ir al mirador del piso 86 hay que pagar US$32 por persona y otros US$52 por persona si se desea subir al mirador de la planta 102. Nosotros no entramos.
De ahí seguimos bajando por la Quinta Avenida, hasta llegar al edificio Flatiron y el Madison Square Park, a la altura de la misma 5ª avenida con la calle 26 St.
El Flatiron Building, que significa edificio plancha por la forma que tiene, finalizó su construcción en el año 1902. En él se han filmado Hitch, El Espantatiburones, Spiderman, o Armageddon. El Madison Square Park hace referencia al nombre del cuarto presidente de los Estados Unidos y principal autor de la constitución del país, James Madison.
En este punto ya habíamos terminado el itinerario planificado del día y decidimos caminar hacia el barrio de Chelsea y conocer el High Line Park, formado por 2.33 km de unas antiguas líneas de tren que recorrían la parte oeste de Manhattan y estuvieron a punto de ser demolidas en 2006.
Empezar el recorrido por el High Line a la altura de la calle 27 con la avenida 10 e iremos bajando en dirección sur. Vemos edificios de diseño espectaculares, entre ellos uno del famoso Frank Gehry, o la bóveda de cristal de la sede central de la diseñadora de moda Diane von Fürstenberg.
En el parque High bajamos al Chelsea Market. El barrio de Chelsea fue una zona industrial y ahora famosa por sus galerías de arte. El mercado de Chelsea fue la fábrica de galletas de la empresa Nabisco, ahora reconvertida en mercado donde encontrar delicatesen de todo el mundo. Los precios no son baratos.
Nos tomamos dos cervezas, una Modelo mexicana y una Sapporo japonesa por US$10 las dos. Luego regresamos al hotel.
Para comenzar el día desayunamos por US$15.53. A continuación tomamos el metro y nos fuimos a Penn Station y ahí tomamos el tren con destino a Newark Penn Station, en la ciudad de Newark. Pagamos US$56 por el tren, ida y vuelta.
Queríamos conocer otro estado, un poco más rural, por lo que fuimos a pasar el día a Nueva Jersey.
La ciudad de Newark es la más poblada de este estado, el cual limita al norte con el estado de Nueva York.
Nos levantamos, desayunamos temprano (US$15,85) y tomamos el metro para ir a caminar por Washington Square, cerca de la Universidad de Nueva York, en el barrio de Greenwich Village, lo que le supone ser frecuentada por una población algo intelectual e inconformista.
En 1826 se construyó, en el emplazamiento de un antiguo cementerio, un arco de triunfo dedicado a George Washington.
Aprovechamos para visitar la calle Washington Mews. Para llegar a ella desde Washington Square se pasa por debajo del arco de triunfo y se sube un bloque la 5ª avenida y ahí se encuentra la calle a la derecha.
Es una callejuela de casas bajas que sale de la agitada 5ª avenida y que te traslada por unos momentos a otra época. En el s. XVIII parte de una granja y más tarde los edificios de esta calle pasaron a ser establos de caballos. Desde los años 50 sirven de casas para particulares y, sobre todo, para profesorado de la Universidad de Nueva York, pero las fachadas siguen casi intactas.
Más tardes visitamos la zona del SoHo. En el siglo XIX y la primera mitad del XX esta era una zona industrial. Es un barrio relativamente amplio, pero la arteria principal, la más turística y donde están la mayor parte de las tiendas, pero no por ello la más bonita, es Broadway. Se recomienda llegar hasta cruzar con Canal St, ya que antes de llegar hay tiendas donde comprar los ansiados Levi's o Converse a precios de ganga.
Después seguimos por Canal Street, en el barrio de Chinatown, uno de los barrios chinos más antiguos e importantes del mundo. Pasearnos por los puestos de la calle. No hay ningún sitio concreto adonde dirigirse, pero sí calles clave: Mott, Elisabeth y Baxter.
Justo en medio de las calles Mott, donde contrasta ver la famosa Iglesia de la Transfiguración o su escuela catolica-romana, y Baxter nos encontramos con el barrio de Little Italy. Este fue algo más amplio en sus orígenes, pero hoy día ha quedado reducido a unos escasos tres bloques en la calle Mulberry.
Descansamos en un parque en Chinatown, donde apreciamos a sus habitantes disfrutar del día y conversar y continuamos caminando hacia el Lower East Side. Este barrio fue uno de los considerados obreros, por lo que las clases más pobres de entonces decidieron establecerse aquí.
Vamos a empezar nuestro recorrido por Grand St. La recorremos en dirección este hasta cruzarnos con Orchard St y aquí giramos a la izquierda para empezar a subir. Orchard St es una calle repleta de tiendas y restaurantes curiosos. Algunos de nuestros preferidos es Dressing Room, en el nº 75 de Orchard St, una tienda vintage de ropa y accesorios con una barra de bar.
Seguimos subiendo Orchard y llegamos a Houston St. Ahí giramos a la derecha y en la próxima esquina nos encontraremos con el conocido Katz's Delicatessen, en el 205E de Houston Street. Es uno de los bares más antiguos de la ciudad (empezó en 1888). Se hizo popular al salir en la película Cuando Harry encontró a Sally. Lo más típico de pedir es el pastrami y el corned beef.
Buscamos un lugar para almorzar, pero no nos llamó la atención ninguno. Nos pareció un barrio un poco abandonado y por momentos no nos sentimos seguros caminando.
Por ello, tomamos el metro de vuelta a Washington Square y compramos almuerzo en un deli por US$36,86, en el que habíamos estado por la mañana, y nos fuimos al parque a comer. En el parque nos encontramos con una manifestación en contra del presidente Donald Trump, por lo que mejor comimos y nos fuimos.
Tomamos el metro hacia el teleférico de Roosevelt. Este teleférico, que cruza de Manhattan a la isla de Roosevelt por el East River, es del año 1976. Se puede pagar con la tarjeta MetroCard.
El viaje en teleférico es bueno por las vistas del skyline que ofrece. Si es temprano y queremos ver la isla, podemos tomar un autobús rojo que recorre la isla de norte a sur y es gratuito.
En el siglo XIX se construyó en la isla de Roosevelt un hospital especial para enfermos de viruela, así como una cárcel, un manicomio y un asilo. Parece que esperaban dedicar la isla a recluir allí a "los indeseables".
De regreso a Manhattan fuimos al MOMA (Museum of Moderm Art), inaugurado en 1929. Es el museo de arte moderno más importante del mundo. Los viernes por la tarde, de 16:00 a 20:00, la entrada es gratuita. Nosotros estuvimos un rato en el museo.
Después de ello tomamos el metro hacia el hotel. Pasamos a por una pizza y cosas para el desayuno (US$17,75) y té frío (US$1,75). Nos acostamos temprano, ya que al siguiente día nos levantábamos a las 2:30 de la madrugada para tomar el vuelo a las 8:00 hacia Chicago.
Nos levantamos a las 2:30, ya que el vuelo salía a las 8:05 de vuelta a Chicago y llegaba a las 9:52.
Tomamos la línea 1 del metro y bajamos en Columbus Circle. Nuestra idea era tomar ahí la línea C y bajar en la siguiente parada, pero al ser tan temprano no pasó esa línea, por lo que tuvimos que irnos caminando con las maletas hasta la 7th Av. y ahí tomamos la línea E hasta la parada Jamaica y luego el Airtrain (US$12).
Después de pagar el Airtrain caminamos hasta el final y cruzamos una puerta sin salida, la cual antes de cruzarla no decía prohibido el paso o cualquier otra indicación. Nosotros íbamos tan cansados que no nos dimos cuenta hasta que los dos la cruzamos. Por dicha logramos abrirla, porque por más que gritamos pidiendo ayuda nadie nos escuchó.
Nos devolvimos 20 metros y a un costado estaba la puerta del Airtrain. Nos subimos a él y bajamos en la terminal 5 del aeropuerto JFK de donde salen los vuelos de Jetblue.
Compramos un té frío US$3,80 y comimos lo que andábamos de desayuno. El avión salió con un retraso debido a que se dañó el overhead del avión.
Llegamos al aeropuerto O'Hare de Chicago y tomamos el tren (US$10), llegamos a la estación de metro y caminamos al hotel. Esta vez nos hospedamos en el Chicago Parthenon Hostel a razón de US$68.09 por noche, con desayuno, y que pagamos en el lugar.
Hicimos el check in y guardamos las maletas. Ya eran las 11:20 am y hacía hambre por lo que aprovechamos para probar la deep dish pizza por US$45.
El plan del día era ir a un centro a esquiar, no obstante, calculamos que no íbamos a poder disfrutar mucho rato por lo que preferimos no ir, pero si se tiene tiempo este es el dato del lugar que pensábamos visitar: Four Lakes.
Esta estación de esquí se encuentra en la población de Lisle y para llegar hasta ella se puede tomar un tren a Lisle, que sale cada hora, a la hora y 40 minutos, y cuyo trayecto dura alrededor de 51 minutos. No dice precio, pero puede andar por US$15 cada tiquete (US$60 por los dos, ida y vuelta).
En Lisle tomar un taxi a Fourlakes Ski. Son como 6 minutos para recorrer 1.7 millas (2.73 km) y puede costar US$20, ida y vuelta.
Ya en Four Lakes, las tarifas son las siguientes: Slope Tickets (pendiente): US$28; alquiler de equipo esquí: US$20; Snowboard: US$38; Casco: US$10; Lecciones en Group Walk up Ski: US$16. En total calculamos que si hubiéramos ido y pagado todo los dos por esquiar costaría US$148 o US$184 por snowboard.
Nosotros decidimos irnos de compras. Hacia las 16:00 nos devolvimos al hotel. Nos acostamos a dormir temprano, pero no fue fácil porque había mucha bulla en el exterior, una discoteca al frente de nuestra ventana.
Era nuestro último día de viaje. El vuelo de regreso salía a las 14:35 desde el aeropuerto O'Hare International de Chicago, por lo que teníamos tiempo de estar en la ciudad hasta las 10:30 de la mañana.
Actividades que podíamos hacer en esas pocas horas:
• Torre Willis. Este rascacielos, conocido anteriormente como Torre Sears, abre de 9 a 22:00 y la entrada para subir a su observatorio The Sky Deck cuesta US$22 por persona.
El edificio tiene 442 metros de altura, con 110 plantas, y es el segundo rascacielos más alto de EE.UU. Es una torre negra con sus antenas blancas. desde donde hay una perspectiva totalmente diferente de Chicago.
Para disfrutar de las mejores vistas, asómate al Ledge sin miedo (está todo acristalado). El observatorio de la torre Willis está a una altura de 412 metros, en el piso 103.
Tener cuidado, mejor si se puede comprar antes el boleto, porque la compra allí dura una hora y media y subir en el ascensor otras dos horas por las largas colas.
• South Michigan Avenue, State Street y LaSalle Street son las tres avenidas paralelas donde encontrarás la arquitectura y las obras de arte públicas más interesantes del Loop de Chicago. Además de los rascacielos y esculturas, nos llamaron la atención las escaleras de incendio, que, si en Nueva York dan un poco de miedo, en Chicago son de infarto: altísimas y de aspecto tan viejo que rezas para no tener que poner los pies en ninguna.
• The Loop. En esta zona destacamos el interior del Chicago Cultural Center, un palacete neoclásico que tiene un punto de información turística, así como el Federal Center, un complejo diseñado por Mies Van der Rohe. También la escultura roja Flamingo del artista Alexander Calder, en la plaza central del complejo, o el Richard J. Daley Center y la plaza Daley Plaza, y el James R. Thompson Center.
Nosotros nos levantamos temprano para ir de compras. Desayunamos una pizza que había quedado del día anterior y compramos un café y sándwich por US$6.23.
No obstante, topamos con la sorpresa de que las tiendas las abrían a las 11:00, por lo que regresamos al hotel y aprovechamos el desayuno que estaba incluido, tomamos el equipaje y nos fuimos al metro a tomar la línea azul para ir al aeropuerto O'Hare (US$6), de donde salía el vuelo de regreso a casa.
Ya en el aeropuerto nos tomamos tres cervezas Peroni por US$30 y unas papas por US$3,37.