Relato de un viaje en coche a París y alrededores

Salimos de Cornellá por la Autovía del Llobregat en dirección a Francia pasando la frontera por Puigcerdá. Continuamos por la carretera nacional francesa N-20 que nos acompañará hasta las cercanías de París. Realizamos la primera parada cerca de Toulouse, después de pasar por el Túnel de Puymorens, Aix les Termes y Foix. Tomamos café y continuamos por Limoges hasta Vierzon, donde realizamos la segunda parada de descanso continuando hasta Orleans donde llenamos el depósito de gas-oil para poder circular sin repostar. Tomamos la autopista A-10 hasta cerca de Orsay, continuando por Versalles, S. Germain en Laye y Le Peq hasta llegar a las 14:00 al camping, el Camping International de Maisons-Lafitte, situado en Maisons-Lafitte, a unos 25 km al noroeste de París.

Durante los últimos kilómetros habíamos tenido una pertinaz lluvia, por lo que al ver que el camping estaba muy mojado y con bastantes charcos de agua decidimos alquilar un bungalow en previsión de futuros remojones. Acertamos porque siguió lloviendo algunos días posteriores. Instalamos todas las pertenencias dejando la furgoneta prácticamente vacía y después de una reconfortante comida nos dispusimos a realizar la primera toma de contacto con París.

Salimos de Maisons-Lafitte por el puente sobre el Sena y después de pasar Sartrouville y Bezons entramos en París por el noroeste (La Defense). Lo primeros que vimos fue el Arco del Triunfo y la Torre Eiffel desde la entrada por la Porte de Maillot, continuamos por la Avenida de los Campos Elíseos hasta llegar a la Plaza de la Concordia donde vimos el gran Obelisco egipcio que la domina. Continuamos por La Madeleine, Plaza Vendome, la Plaza Pompidou y cerca de Notre-Dame tomamos la margen izquierda del Sena hasta llegar al pie de la Torre Eiffel, donde entramos en las oficinas de los Bateaux Parisiens para realizar la reserva de la cena en barco por el Sena para el lunes por la noche. Vimos los barcos y el muelle de embarque y paseamos por la Torre Eiffel y el Palacio de Chaillot, desde donde regresamos hasta el Arco del Triunfo regresando a Maisons-Lafitte sin apenas bajar del coche llegando al camping para descansar y tomar la cena.

Salimos de Maisons-Lafitte entrando en París por La Defense y el Arco del Triunfo hacia el Palacio de Chaillot, donde aparcamos delante mismo y después de admirar la preciosa vista de la Torre Eiffel, debido al tiempo nublado decidimos ir a ver Notre-Dame. Pasamos por el Hotel des Invalides y por el Bulevard de Saint Germain nos dirigimos al Barrio Latino, aparcando en la calla Poissy, cerca de la Universidad.

Paseamos al lado del Sena viendo los numerosos puestos de venta de pinturas, fotografías, revistas, etc. Vimos Notre-Dame por fuera y por dentro, con mucho alboroto y fotografías en cantidad y muchos turistas como nosotros. A la salida, las conocidas fotografías de grupo con el frontal de la catedral detrás del grupo, y paseo por la plaza de la catedral. Cerca vimos el mercado de las flores, unas cuantas tiendas de flores cerca del Palacio de Justicia. Dentro del mismo Palacio la Sainte Chapelle y a continuación por el puente sobre el Sena nos sentamos en el Café de Saint Michel al lado de la fuente del mismo nombre que da entrada al Barrio Latino, por donde fuimos paseando viendo los restaurantes, tiendas y otras curiosidades de esta zona tan popular de París.

Como el tiempo había mejorado decidimos volver a la Torre Eiffel y después de poco más o menos media hora de cola tomamos los ascensores que permiten subir hasta el piso alto de la Torre, desde donde se ve todo París con una perspectiva excelente para poder apreciarla, haciendo fotos en todas direcciones y cuando creimos que era suficiente bajamos y continuamos paseando. Fotos y más por los llamados Campos de Marte, que son los jardines que se extienden desde el pie de la Torre Eiffel hasta la Escuela Militar francesa que se ve al fondo de los mismos.

Nuevamente, y después de desayunar en el camping, nos dirigimos a París para continuar conociéndolo. Una vez en el Arco del Triunfo y por el Bulevard Batignolles nos dirigimos al Barrio de Montmartre, vimos el cementerio y después de algunas vueltas por calles estrechas llegamos justamente hasta la puerta principal de la iglesia del Sagrado Corazón, que se muestra espléndida presidiendo la ciudad desde el punto más alto de la misma en pleno Barrio de Montmartre. Aparcamos en la zona posterior de la iglesia, que en Agosto no es de pago, y visitamos la iglesia que si parece un lugar de recogimiento y paz y con menos turistas que Notre-Dame.

Realizamos las inevitables fotografías de la impresionante vista de la ciudad que se extiende al pie de la gran escalinata que asciende desde la parte baja del barrio, también de los alrededores de la iglesia y continuamos hacia la Plaza de Tertre que es una zona totalmente ocupada por los restaurantes y pintores de todo tipo de cuadros, desde paisajes, caricaturas, bodegones, etc. y llena de turistas que compran poco, pero miran mucho en la multitud de tiendas típicas de camisetas, postales, pañueños, etc. Tanto o más que las tiendas son dignos de ver los restaurantes de la plaza y alrededores en un típico estilo francés y el vestuario de los camareros en un afán de total promoción turística, pero atractivo y agradable de contemplar con los ojos abiertos de par en par como niños por Navidad. Bonito.

Después de recorrer todas las calles turísticas de la zona nos detuvimos a reponer fuerzas en el café más típico, justo el situado en la esquina que da entrada a la plaza volviendo al coche después de realizar las obligadas compras de recuerdos. Relajadamente iniciamos el descenso hacia el Bulevard de Clichy contemplando el famoso Moulin Rouge y la Plaza Pigalle bajando por el Bulevard Magenta, el barrio negro de París, pasamos por las estaciones de ferrocarril del Norte y del Este y por el Bulevard La Fayette hasta el centro principal de las famosas Galerías La Fayette, regresando al camping para acicalarnos adecuadamente para la cena de esta noche en el barco por el Sena.

Regresamos al pie de la Torre Eiffel para embarcar a las ocho y acomodarnos los seis en una mesa redonda en la parte delantera del barco, todo acristalado y con mucha visión al exterior. La cena comenzó con champagne francés y los platos exquisitos en el estilo de comida francesa. Estuvo amenizada por una cantante y posteriormente hubo baile en el mismo barco, finalizando nuevamente con champán. El itinerario recorrió toda la zona turística del Sena, partiendo de la Torre Eiffel, continuando por el Museo Orsay, por Notre-Dame hasta la Biblioteca Nacional donde se da la vuelta para regresar por el Louvre, llegando hasta la reproducción de la Estatua de la Libertad y volviendo a los pies de la Torre Eiffel para desembarcar, pasando por debajo de todos los puentes iluminados, con unas imagénes extraordinarias de luz y color.

A continuación fuimos a ver la Torre Eiffel desde el palacio de Chaillot, de noche, más espectacular que de día, si es posible, totalmente iluminada y con luces intermitentes cada hora con una duración de 5 minutos aproximadamente. Después de este bonito día regresamos a Maisons-Lafitte aparcando el coche en la calle porque era demasiado tarde para entrar.

Hoy vamos a Versalles. Salimos del camping en dirección sur, pasando por Le Peq y entramos en el pueblo por el lateral de los terrenos del famoso castillo hasta llegar a la avenida que conduce directamente a la entrada principal. Aparcamos en la gran explanada que hay delante del castillo y después de hacer más de una hora de cola conseguimos los tickets que dan entrada.

Iniciamos la visita por la zona izquierda del castillo, luego por la central y finalmente por la derecha. En las tres zonas hay control de entrada y en todas el itinerario es similar, pasillos indicando el camino a seguir y el número de la sala en que te encuentras y un sinfin de turistas dando vueltas por las habitaciones utilizadas por los reyes y la corte de Francia. Después del largo recorrido salimos a los jardines, que son espectaculares por lo grandes y cuidados que están, caminamos por la zona que nos pareció oportuno y regresamos a la entrada principal después de una larga visita por estas suntuosas instalaciones.

Regresamos al camping por un camino distinto y más largo debido a un despiste de orientación.

Otra vez nos dirigimos a París, hoy con la intención de andar por la zona comercial y realizar algunas compras. En primer lugar nos dirigimoa a la Plaza Vendome, donde pudimos ver los escaparates de las mejores firmas comerciales de joyería y también el Hotel Ritz, continuamos hacia La Ópera, viendo las tiendas que se exponen hasta llegar al edificio principal de Galerías Lafayette, donde subimos hasta la terraza para contemplar unas bonitas vistas de París, desde el Sagrado Corazón hasta la Torre Eiffel. Comimos en su restaurante y realizamos algunas compras mientras contemplábamos la bonita decoración, tanto de la cúpula como las paredes de las galerías.

A continuación contemplamos el edificio de la Ópera y tomamos café en uno típico cercano, continuamos de regreso al parking en la Plaza Vendome, fuimos a ver La Madeleine, el Restaurante Maxim's, la Plaza de la Concordia y los puentes del Sena regresando a Maisons-Lafitte.

Hoy vamos al ver el Louvre. Aparcamos debajo del Louvre e iniciamos el recorrido siguiendo el itinerario aconsejado. En primer lugar el edificio derecho, con las grandes pinturas de los mejores pintores, sobre todo franceses con reproducciones de situaciones históricas. En esta zona vimos el cuadro más famoso, La Gioconda (o Mona Lisa) de Leonardo da Vinci, protegido dentro de una gran vitrina de cristal y con muchos elementos de seguridad. Subiendo la escalera principal al fondo se encuentra la figura de la Victoria de Samotracia, a la que pudimos fotografiar sin turistas alrededor porque cerraron la zona momentáneamente, es extraordinaria.

La considerada tercera joya del Louvre es la Venus de Milo que se encuentra en los bajos del edificio, también impresionante. A continuación en el edificio central están representadas las antiguas culturas griega, romana, egipcia,.. interesantes por su antigüedad y el buen estado de conservación de los materiales.

Finalmente recorrimos el edificio izquierdo en el que hay excelentes esculturas humanas de gran tamaño en los patios interiores del edificio. Además es de destacar el piso superior donde se encuentran las habitaciones de Napoleón III, de cuando la corte se encontraba en este Palacio del Louvre. Unas habitaciones mejor conservadas que las de Versalles y con poca concurrencia de visitantes, lo que favorece las posibilidades de contemplación de todos los detalles y ornamentos.

Una vez terminada la visita salimos al exterior por la pirámide de cristal viendo la zona del Arco de Carrusel y volvimos al parking a recoger el coche para dirigirnos al Bois de Bologne por la Porte Dauphine, viendo el gran lago, los bosques, el camping, el hipódromo, etc. Salimos del bosque por el borde del Sena en dirección norte viendo las numerosas barcazas habitadas con entradas desde la calle como si fueran casas y nos dirigimos a La Defense, donde dimos varias vueltas sin bajar del coche para ver los grandes edificios de oficinas a los que prácticamente sólo se puede acceder desde los parkings o por pasos elevados desde el metro. Salimos por Courveboie hacia Bezons y de allí a Maisons-Lafitte.

Hoy entramos en París por la Porte de Champerret y nos dirigimos al norte por el periférico interior (Rondas). Durante el trayecto vemos el Sagrado Corazón por la parte posterior y continuamos hasta el extremo nordeste, donde abandonamos el periférico a la altura de la Porte de La Villette tomando la Avenida de Flandre al lado de la Ciudad de las Ciencias y el Parque de la Villette en una zona con pocos turistas hasta llegar a la Avenida de Crimea que tomamos a la izquierda cruzando el Canal de S. Martín a la altura del embalse de La Villette y llegando a la Plaza de las Fetes, donde vimos un gran mercado al aire libre que marca el inicio del barrio chino y que continúa por la Calle Temple, llena de comercios, restaurantes, bazares, etc. con muchos productos y gran cantidad de gente en locales y calles.

Llegamos a la Plaza de la República con su estatua emblemática para los franceses y por el Bulevard Beaumarchais hasta la Plaza de la Bastilla, con su gran columna con los nombres de los caídos en la toma de la prisión de su nombre y la pequeña estatua encima de la columna. A continuación nos dirigimos a la Plaza de Vosges, cuadrada, rodeada de edificios similares, los árboles cortados para facilitar la vista de toda la plaza desde cualquier punto y su bonita fuente central. Salimos de la plaza en dirección al Jardín de Lady Di que no pudimos visitar porque sólo se abre los sábados y domingos, en la calle Manteaux Blancs y, al llegar al cruce con la calle Archives, las chicas aprovecharon para bajar del coche casualmente en una calle de comercios de bisutería y otros abalorios al por mayor. Como fuera consiguieron que les vendieran y estuvimos un buen rato de tienda.

Después fuimos al Ayuntamiento donde había una playa artificial con pista de volley y sus casetas típicas de playa. Pasamos el Sena y por delante de la Universidad de La Sorbona llegamos a la altura del Palacio y Jardines de Luxemburgo a los que dimos la vuelta completa parando en la zona más bonita para hacer fotografías y estirar las piernas. Cerca del Boulevard de Saint Germain, en la calle Cherche Midi fuimos a comprar pan a Poilane, una de las panaderías más antiguas y bien conservadas de París, nos enseñaron el horno y todas las dependencias, incluyendo una lámpara hecha de pan en el despacho. Por la Avenida Lecourbe fuimos hasta el extremo suroeste para volver hasta la Puerta de Maillot, tomando el regreso a Maisons-Lafitte y al puente sobre el Sena e hicimos unas últimas compras en el paseo del pueblo. Después de recoger el máximo posible del equipo de viaje nos fuimos al pueblo de Poissy, a Saint Germain en Laye y a Le Peq, donde paramos a cenar en un Búfalo Grill junto al Sena.

Nos levantamos a las 7 para acabar de recoger el equipo y después de desayunar salimos a las 10 en dirección a Versalles y continuamos el mismo camino que a la ida hasta Vierzon. Poco antes de Orleans encontramos un buen tramo de marcha lenta que nos hizo perder posiblemente alrededor de una hora.

Paramos a comer cerca de Clermont-Ferrand y poco después cambió la autopista, pues llegábamos al macizo central francés y tuvimos un tramo como mínimo de 100 km con fuertes desniveles y curvas. Más adelante paramos a la altura de Millau para ver y fotografiar el puente desde una zona adecuadamente preparada para ello, es espectacular. Al entrar en la autopista del sur en Beziers encontramos un tramo de mucho tráfico, pero sin retenciones, hasta cerca de la frontera, a partir de aquí menos tráfico y sin incidencias hasta llegar a Cornellá alrededor de la 1 de la madrugada.