México. Este país norteamericano limita al norte con los Estados Unidos de América y al sureste con Belice y Guatemala, mientras que sus costas están bañadas por el mar Caribe al este y el océano Pacífico al oeste.
Es un país con una extensión muy grande, con casi dos millones de km² (casi cuatro veces la superficie de España), siendo el 14º país más extenso del mundo.
México reconoce al español, lengua materna de muchos de sus habitantes, y a 67 lenguas indígenas como lenguas nacionales, aunque no hay una lengua oficial establecida.
Teniendo en cuenta además la enorme riqueza histórica, cultural y natural del país es fácil entender porque México es el principal destino turístico de América Latina y uno de los 10 países más visitados del mundo.
No en vano cuenta, por ejemplo, con más de 30 sitios que son considerados Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.
Por ello podemos afirmar que, a menos que dispongamos de varios meses por delante para recorrer tan vasto país, podemos destinar varios viajes a México sin temor a repetir paisajes, cultura o clima gracias a su gran diversidad.
En este corto pero intenso viaje (casi 12 días completos) descrito aquí, con inicio y final en Ciudad de México, recorrimos puntos de interés de los estados mexicanos de Distrito Federal, Hidalgo, México, Puebla, Tlaxcala, Oaxaca, Guerrero y Morelos.
Del 21 de Diciembre de 2001 al 2 de Enero de 2002.
Día 1: BCN → →
Frankfurt → →
Ciudad de México
Día 2: Ciudad de México
Día 3: Ciudad de México - Tula
Día 4: Tula - Ciudad de México - San Juan Teotihuacán
Día 5: San Juan Teotihuacán - Ciudad de México - Puebla
Día 6: Puebla
Día 7: Puebla - Tlaxcala - Cacaxtla - Puebla - Cholula - Puebla
Día 8: Puebla - Oaxaca
Día 9: Oaxaca - Monte Albán - Oaxaca
Día 10: Oaxaca - Ciudad de México - Taxco
Día 11: Taxco
Día 12: Taxco - Cuernavaca - Ciudad de México
Día 13: Ciudad de México → →
Frankfurt → →
BCN
Justo en las fechas de este viaje, concretamente el 1 de enero del 2002, entraba en vigor el euro. Por este motivo, aquí aún mencionamos los cambios referidos a las antiguas pesetas, además de sobre el nueva moneda europea.
Cambio medio: 1 US$ (dólar USA) = 1.14 Eur / 189.73 pts
1 $ (peso mexicano) = 0.13 Eur / 21.08 pts (1 US$ = 9 $)
En México el símbolo $ hace referencia siempre al peso mexicano, mientras que US$ es al dólar norteamericano. No confundirlos.
+ 814'37 Eur (vuelo ida/vuelta + tasas aeropuertos)
+ 392'34 Eur (hoteles, comida, transportes, regalos, ...)
= 1206'71 Eur (total por persona)
Para los ciudadanos de nacionalidad española es suficiente con el pasaporte en vigor.
No hay obligación de ninguna vacuna.
A pesar de la mala fama que arrastra México, y especialmente Ciudad de México, nosotros no tuvimos ningún problema de seguridad durante nuestra ruta. En cualquier caso deben tomarse las medidas de seguridad habituales durante el viaje.
Para movernos por territorio mexicano recurrimos, en este caso, casi exclusivamente a los autobuses.
En México los autobuses son quizás la forma más económica y eficiente para trayectos de corta y media distancia, que son los que realizamos en este viaje. De hecho los trayectos más largos que hicimos fueron Oaxaca-México DF (442 km) y Puebla-Oaxaca (312 km).
Como norma general, en el caso de autobuses de medio o largo recorrido siempre conviene reservar con uno o dos días de antelación, especialmente en fechas de vacaciones para los mexicanos, como Navidad o Semana Santa.
Aunque suele haber mucha frecuencia en algunas rutas también hay muchos mexicanos que se mueven en este medio de transporte, llenando rápidamente los autobuses disponibles.
Por otro lado, antes de subir a un autobús de medio y largo recorrido, personal uniformado de la terminal suele realizar un control de los viajeros y el equipaje de mano a la búsqueda de armas. Por lo general, los autobuses que realizan estos tipos de recorrido son caros, pero bastante cómodos.
Finalmente, en las terminales de autobuses mexicanas (al menos las más grandes) suele haber un servicio de consigna para dejar el equipaje. En las fechas de este viaje el coste era de 3 $/hora. Ir al WC (sanitarios) en la terminal costaba 2 $.
En Ciudad de México, como en el resto del país, los domingos y festivos, por lo general, todos los museos y sitios no privados dónde debe pagarse una entrada para entrar son gratuitos.
Por lo tanto se pueden planificar las visitas a estos sitios teniendo en cuenta este hecho, aunque la contrapartida es que encontraremos bastantes más visitantes que cualquier otro día.
Durante las fechas de nuestro viaje disfrutamos de un clima básicamente soleado, con una temperatura fresca y agradable. En cualquier caso debe llevarse alguna pieza de abrigo para momentos puntuales.
En Oaxaca, situado más al sur, el clima es más cálido, pero sin llegar al calor excesivo.
- 7 horas respecto del horario de invierno de la España peninsular.
Mexico, Lonely Planet (ed. Octubre 2000, en inglés).
Tomamos un vuelo desde Barcelona a Frankfurt (2 horas y 5 minutos) y allá conectamos con otro de Frankfurt a Ciudad de México (9.600 km, 11 horas y 30 minutos), ambos de la compañía aérea Lufthansa.
En la terminal de llegadas del mismo aeropuerto Ciudad de México hay varias oficinas de cambio. Tienen rotulado el cambio vigente, por lo tanto es necesario mirar dónde se ofrece el mejor cambio y sin comisión.
Para llegar al centro de Ciudad de México se puede hacer mediante taxi o metro.
Si se escoge la opción del taxi es altamente recomendable comprar antes el trayecto en la oficina de Transportación Terrestre que hay en la terminal de llegadas, indicando a qué zona se quiere ir (por ejemplo indicar la zona del Zócalo).
El precio del trayecto es en función de la zona destino y como ejemplo ir a la zona del Zócalo (Zona 2) cuesta 80 $. Con el ticket que nos dan en esta oficina es necesario salir fuera, hacer cola y coger un taxi de color amarillo y blanco con un avión dibujado en el lateral, sin hacer caso a otros supuestos taxistas que se ofrecen a llevarnos.
Al subir al taxi recomendamos memorizar su número de licencia o matrícula para posibles reclamaciones posteriores. Dado el alto índice de robos en taxis de esta ciudad cualquier precaución es poca. Negarse a cualquier pago adicional o propina si el taxista lo reclama mediante cualquier excusa.
Si se llega a una hora "normal" una opción mucho más barata es coger el metro. Hasta ahora parece que había restricciones en cuanto a que no se permitía acceder al metro con equipaje voluminoso, pero ahora ya no hay ningún problema.
En cualquier caso es necesario tener en cuenta que en días laborables y hora punta puede estar tan sobresaturado que haga poco menos que imposible viajar con mochilas o maletas grandes (es el tercer metro más utilizado del mundo). Recomendamos vigilar muy bien el equipaje, especialmente si hay mucha aglomeración de gente.
El precio del billete sencillo es de 2 $ y para coger el metro desde la terminal de llegadas es necesario ir al final de la terminal de vuelos nacionales, salir fuera, y andar en la misma dirección unos 200 metros hasta llegar a la parada 'Terminal Aérea' marcada con una M estilizada.
Para llegar a las zonas de hoteles del centro será necesario hacer varios transbordos entre líneas bajando finalmente en 'Allende', 'Zócalo' o 'Hidalgo' por ejemplo.
El hotel Buenos Aires (C/ Motolinía 21 - Tel. 5518 2137), muy céntrico, a 300 metros del Zócalo, ofrece una habitación sencilla con dos camas o una cama matrimonial, con baño privado, agua caliente, e incluso televisión por 125 $.
Tiene una buena relación calidad-precio, pero tened en cuenta que en el edificio contiguo hay una discoteca que las noches del fin de semana cierra a las 4:30 h. y la música llega hasta el hotel (!) y molesta si tenéis el sueño ligero.
Dado que la ciudad está a 2.240 metros de altura las noches (al menos en esta época del año) son bastante frescas y ésto hace que se agradezca disponer de agua caliente en la ducha.
En el restaurante Potzolcalli, en la Av. 5 de Mayo, se puede desayunar un café con leche, un zumo de naranja y una selección de bollería ('pan dulce') por unos 36 $, aún cuando el precio final irá en función de los bollos consumidos (a razón de 5 $ la pieza). Esta modalidad de desayuno se encuentra prácticamente por todas partes del país.
Para almorzar y/o cenar un buen sitio es Café El Popular, también en la Av. 5 de Mayo, ofreciendo buenas comidas a precios razonables. Además está abierto las 24 horas del día.
En la zona de Coyoacán tenemos el restaurante chino Kowloon (en la Plaza Hidalgo) pero que sirve también comida mexicana, y también el restaurante La Casa de los Tacos (en la calle Carrillo Puerto, entre las calles Ortega y Carranza) que ofrece una excelente comida corrida (menú a precio fijo) por 45 $.
CIUDAD DE MÉXICO (antes era conocida como México D.F.). Es la capital y la ciudad más grande de México. Su población es de casi 9 millones de habitantes, pero el área metropolitana puede llegar a más de 20 millones, siendo la tercera área metropolitana más grande del mundo después de Tokio y Delhi.
Zona del Centro Histórico (declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO al 1987).
Quizás este es el mejor sitio para empezar a explorar esta enorme ciudad y concretamente el Zócalo o Plaza de la Constitución, el corazón de la ciudad.
Llegando a la plaza por la Av. 5 de Mayo lo primero que encontramos, en uno de los lados de esta inmensa plaza, es la Catedral Metropolitana.
Una vez dentro, y aparte de su indudable valor artístico (especialmente el Altar de los Reyes, detrás del altar principal, y las capillas laterales como magnífico ejemplo de arte barroco y churrigueresco), es necesario fijarse en una especie de péndulo que cuelga de la cúpula principal.
Este péndulo permite apreciar el hundimiento gradual del edificio debido a la poca solidez del terreno sobre el que se edificó.
En el exterior de la Catedral, durante el día, suele haber una buen grupo de hombres apoyados en la pared con un cartel ofreciendo sus servicios en lampistería, albañilería, etc. Junto a la Catedral se encuentra el Sagrario Metropolitano, imponente por su fachada recargada.
En otra esquina de la plaza están las excavaciones del Templo Mayor que se pueden visitar pagando 30 $ o bien verlas desde fuera, puesto que se puede ir bordeando el recinto entre multitud de paradas de venta de cualquiera objeto imaginable.
En la calle de la Moneda, adyacente a la plaza, se pueden encontrar preciosos edificios coloniales hechos de tezontle. Uno de ellos es el Museo de la Secretaría de Hacienda y Tesoro Público. La entrada cuesta 8 $ y contiene una importante colección de arte, pero lo mejor es el propio edificio (antiguo palacio del archiobispado) y el jardín interior, de estilo colonial.
Ocupando todo un lado del Zócalo tenemos el Palacio Nacional. La entrada es gratuita, pero es necesario presentar el pasaporte.
Este enorme edificio sólo es parcialmente visitable, pero en cualquier caso es muy recomendable, especialmente el gran mural de Diego Rivera con escenas precoloniales, que se encuentra en la segunda planta.
En mitad de la propia plaza siempre hay un gran ambiente de gente, vendedores, y con una poco de suerte también se pueden ver interesantes representaciones folclóricas indígenas e incluso actos reivindicativos de diversa índole.
Zona de La Alameda. Desde el Zócalo se puede llegar andando por la Av. Maderos, pero antes de llegar se puede visitar el Palacio Iturbide (entrada gratuita), con una exposición de objetos de finales del s. XIX.
También la Casa de los Azulejos, un antiguo palacio con toda la pared exterior recubierta de ladrillos de estilo español y árabe. En su interior hay un restaurante de la cadena Sanborn's y una librería. En la escalera de subida al segundo piso del restaurante hay un bonito mural de Orozco.
En un lado del parque de La Alameda encontramos el Palacio de Bellas Artes, magnífico edificio de mármol blanco.
En el lado norte del parque tenemos el Museo Franz Mayer. Se puede entrar y visitar todo el Museo o bien simplemente pagar 5 $ para acceder sólo al claustro, dónde hay una cafetería en que se puede beber y/o comer algo en un entorno precioso y muy tranquilo y acogedor.
Zona Rosa. Se llega a ella andando por el Paseo de la Reforma, principal bulevar de Ciudad de México y zona principalmente de grandes edificios modernos, y después girando a la izquierda al llegar a la calle Génova.
La Zona Rosa es un área de bulevares, cafés, restaurantes, hoteles, cibercafés y tiendas. En ella se pueden ver casas muy bonitas, con un cierto estilo parisino.
Todo ello hace que la zona tenga un aspecto "chic", por lo que es muy agradable pasear por sus calles.
Bosque de Chapultepec. Se trata del parque más grande de Ciudad de México.
Además de proporcionar un paseo muy agradable, el principal interés de la visita aquí son algunos museos y sobre todo el castillo de Chapultepec, antigua residencia de los virreyes de Nueva España.
Por otra parte, desde el castillo hay unas magníficas vistas de buena parte de la ciudad. La visita al castillo cuesta 30 $.
La entrada al parque, donde se encuentra el castillo, se cierra a las 16:30 h. y para llegar hasta aquí desde el centro se puede coger un 'pesero' (minibús verde y blanco) en la esquina de Alameda con Paseo de la Reforma (2'5 $) o bien ir andando, aun cuando se trata de un trayecto bastante largo.
Una tercera opción es coger el metro y bajar en la estación 'Chapultepec' (L-1), con los oportunos transbordos.
Coyoacán. Barrio situado a unos 10 km del centro (Zócalo), con una personalidad propia. De hecho, antes era un pequeño pueblo y fue absorbido por Ciudad de México hace unos 50 años.
Especialmente los fines de semana y festivos hay un gran ambiente de tenderetes, mimos, músicos, atracciones infantiles, etc. en su núcleo central, formado por Plaza Hidalgo y el Jardín del Centenario.
Para llegar hasta aquí desde el centro lo más práctico es coger el metro y bajar en la estación 'Viveros' (L-3). Al salir fuera bordear el parque Viveros por la Av. Progreso hasta llegar a la Av. Sosa.
Esta zona es bastante tranquila y con casas bajas de estilo colonial muy bonitas.
Un buen sitio para pasear sin prisa. Después sólo es necesario seguir esta avenida hasta llegar al Jardín del Centenario (en total unos 2 km desde 'Viveros').
Adyacente a esta plaza-jardín se encuentra la Plaza Hidalgo, con la Parroquia de San Juan Bautista. En toda esta zona se puede disfrutar de un ambiente sensacional.
Subiendo desde Plaza Hidalgo por la calle Allende llegamos a la casa-museo de Frida Kahlo, dónde vivió esta artista mexicana con su marido Diego Rivera. La entrada cuesta 25 $ y al ser de gestión privada no es gratuito los festivos.
Además del hecho de poder ver la obra y recuerdos de esta artista, la propia casa y el jardín en sí que alojan el museo ya tienen un interés singular.
En el lado este de Plaza Hidalgo se encuentra el Bazar Artesanal de Coyoacán, un buen sitio para encontrar un recuerdo o regalo de vuelta a casa en los múltiples tenderetes de artesanía.
Para volver al centro se puede coger un pesero con destino 'Gral. Anaya' en la esquina de las calles Allende y Xicontécatl (2 $) y al llegar al final tomar el metro en la estación 'General Anaya' (L-2) y bajar en 'Allende', por ejemplo, sin necesidad de cambiar de línea.
Desde Ciudad de México es necesario coger una autobús en la Terminal de Autobuses del Norte (TAN), una de las cuatro grandes terminales de autobuses que tiene la ciudad.
Para llegar a la TAN desde el centro se puede coger un pesero, autobús o trolebús en la esquina de la Av. Eje Central con la calle Donceles (2 $). En la zona 8 de la TAN se compran los billetes o 'boletos' a Tula en el mostrador de la compañía Ovnibus. Cuesta 40 $ en primera clase y salen cada 40 minutos. El trayecto dura unos 90 minutos.
Dado que Tula de Allende está a unos 65 km de Ciudad de México se puede ir y volver el mismo día sin problema. Pero nosotros escogemos pernoctar aquí y poder visitar el sitio arqueológico bien temprano a la mañana siguiente.
El hotel Casa Blanca (en Pasaje Hidalgo), muy céntrico pero muy tranquilo, ofrece una habitación sencilla con una cama matrimonial, con baño privado y agua caliente por 160 $. Todo es muy nuevo y está bastante bien.
Junto a la puerta de entrada a este hotel hay un restaurante casero llamado Las Cazuelas que ofrece un desayuno a precio fijo de café con leche, zumo natural y huevos en cualquiera de sus múltiples variedades por sólo 15 $.
TULA DE ALLENDE. Esta ciudad fue, con toda probabilidad, la capital de la civilización tolteca, y hoy día se pueden visitar los restos de su antigua ciudad en el interesante conjunto arqueológico de Tula.
El conjunto de Tula comprende un museo, el cual reúne los hallazgos arqueológicos en la zona, y los restos de la antigua ciudad tolteca, la cual se encuentra a unos 600 metros de distancia del museo.
De esta antigua ciudad podemos ver actualmente dos campos de pelota, dos pirámides, el palacio quemado y, sobre todo, los telamones.
Los telamones son unas figuras de guerreros, de aspecto feroz, que miden 4'5 metros de altura y están sobre una de las pirámides del conjunto.
Además desde este lugar hay una vista soberbia sobre la ciudad de Tula y todos los valles circundantes, incluyendo una vista apocalíptica de las chimeneas de la enorme refinería estatal de Tula y de unas industrias cementeras escupiendo una humareda impresionante.
La entrada al recinto arqueológico cuesta 30 $.
Para llegar hasta aquí se puede coger un minibús en la Av. Zaragoza y que nos deja en un cruce a 100 metros de la entrada (el trayecto cuesta 3'5 $) o hacer andando el mismo camino que hace el autobús (aproximadamente unos 2 km).
También vale la pena darse una vuelta por el centro de la ciudad de Tula para ver el Zócalo (nombre de la plaza principal en cualquier ciudad o pueblo mexicano) con sus limpiabotas, vendedores de chucherías, etc.
Y la imponente iglesia-fortaleza en la Avenida Zaragoza (de hecho, es lo que queda de un antiguo monasterio fortificado del s. XVI).
Al igual que en el caso de Tula se puede realizar la excursión al conjunto arqueológico de Teotihuacán en un solo día desde Ciudad de México (está a sólo 45 km de la capital) cogiendo un autobús en la TAN que nos lleve directamente a la zona de las pirámides.
Pero nosotros también aquí escogimos pernoctar en San Juan Teotihuacán, el pueblo más próximo al conjunto, y poder visitar el sitio arqueológico temprano a la mañana siguiente, evitando así las aglomeraciones y el calor.
Nosotros intentamos llegar directamente a San Juan Teotihuacán desde Tula, pero dada la proximidad de Ciudad de México resulta mucho más fácil volver a Ciudad de México y allá coger un autobús a San Juan Teotihuacán en la misma TAN.
Por tanto, en la terminal de autobuses de Tula tomamos un autobús ordinario a Ciudad de México por 33 $ y que llega a la TAN 90 minutos después, pasando por la enorme refinería estatal de Tula.
En la zona 8 de la terminal TAN se compran los billetes a San Juan Teotihuacán, en el mostrador de la compañía Fecha Roja, por 18 $. Salen cada 15 minutos y tardan una hora al hacer el trayecto, dejándonos finalmente en el Zócalo de San Juan Teotihuacán.
Hay poca oferta de alojamiento dónde escoger, especialmente si hablamos de sitios baratos. El Hotel Pirámides Plaza, mencionado en alguna guía como Lonely Planet, ya no existe. Hay alguna 'casa de huéspedes', pero resulta cara para lo que ofrece.
Así pues la mejor relación calidad-precio quizás la ofrece la Posada Sol y Luna, a unos 750 metros del centro. Por 300 $ ofrece una habitación bastante grande (la llaman king size), con baño privado, calefacción (se agradece en esta época), y TV, es muy tranquila y está impecable. Desborda nuestro presupuesto inicial pero vale la pena.
Para comer tampoco hay demasiado oferta. En una esquina próxima al Zócalo hay una pizzería que ofrece pizzas muy buenas a partir de 45 $.
Para almorzar en la zona arqueológica recomendamos algunos de los restaurantes que hay fuera de la salida 2 del recinto, al principio de la carretera a San Juan Teotihuacán, comiendo un plato muy completo de comida corrida (comida casera) por sólo 30 $.
Antes de marchar del restaurante podéis pedir probar el pulque, un licor proveniente también de una variedad de cactus pero mucho más suave que el tequila o el mezcal.
ZONA ARQUEOLÓGICA DE TEOTIHUACÁN (declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1987). Es un lugar de visita obligada en un viaje a la zona y conviene dedicarle al menos una mañana entera.
Agunos de los puntos de interés de esta zona arqueológica son los siguientes:
• Pirámide del Sol: es la tercera pirámide más grande del mundo, tras la de Tepanapa en Cholula (México) y la de Keops en Gizah (Egipto). Tiene una altura de 63 metros.
• Pirámide de la Luna: es algo más pequeña que la anterior, pero más armoniosa.
• Calzada de los Muertos: una de les principales avenidas de la antigua ciudad teotihuacana.
• Palacio de Quetzalpapálotl.
• Palacio de Tepantitla.
• Templo de Quetzalcóatl (o Templo de la Serpiente Emplumada), situado en el interior de la Ciudadela.
El área a visitar es bastante grande, se tiene que andar mucho y suele hacer bastante calor en las horas centrales del día. Por lo tanto se recomienda ir con zapatos cómodos y llevar algo de comer y sobre todo para beber. La entrada al recinto cuesta 35 $.
A la hora de subir a las pirámides no olvidéis que debido a la altura de la zona, unos 2.300 metros sobre el nivel del mar, el esfuerzo físico a realizar es superior al habitual.
Por último, recomendamos ir pronto por la mañana para ahorrarse las horas de más calor y sobre todo la multitud de visitantes que llegan en autobús directamente desde Ciudad de México.
Nosotros estuvimos un buen rato completamente solos en la cima de la Pirámide del Sol a las 9 de la mañana.
Pero sólo cuatro horas después, ya se podía ver un auténtico "hormiguero" humano subiendo y bajando de las pirámides.
Desde San Juan Teotihuacán se puede llegar andando puesto que sólo está a unos 2 km (la Posada Sol y Luna está a sólo 1'25 km) o bien con un minibús que sale del Zócalo (3'5 $).
Desde San Juan Teotihuacán no queda más remedio que volver a la TAN de Ciudad de México (una vez más) y coger allá un autobús directo a Puebla.
Por el Zócalo de San Juan pasa a menudo un autobús que va a Ciudad de México. Cuesta 18 $ y tarda casi una hora (menos si no hay atascos en la carretera).
Una vez en la Terminal de Autobuses Norte (TAN) de Ciudad de México es necesario buscar el autobús a Puebla que nos convenga más según precio y horario.
Suele haberlos cada 30 minutos y cuesta 77 $ en primera clase. Tarda unas dos horas en hacer los 130 km de trayecto hasta el CAPU de Puebla (nombre dado a su terminal de autobuses), tras bordear durante kilómetros y kilómetros esta enorme ciudad que es Ciudad de México.
Una vez en Puebla, para llegar a la zona de hoteles del centro histórico desde el CAPU, es necesario salir fuera de la terminal y pasar por un paso elevado sobre una especie de autovía y esperar al otro lado que pase algún minibús que vaya al centro (preguntar al conductor cuando pare).
En la terminal central de Puebla (CAPU) hay un servicio de consigna para dejar el equipaje, con un coste de 3 $ por hora. Ir al lavabo (sanitarios), como en el resto de terminales del país, cuesta 2 $.
El Hotel Victoria ofrece una muy buena relación calidad-precio, dado que una habitación con baño privado cuesta 100 $ y es bastante tranquilo. Además es muy céntrico, puesto que se encuentra en el nº 306 de la calle 3 Poniente, a 2 manzanas (cuadras) del Zócalo.
Un buen sitio para desayunar es el Café Plaza, muy cerca del Hotel Victoria. Para almorzar y/o cenar un sitio magnífico es el restaurante La Concordia (2 Sur, entre 5 y 7 Oriente), ofreciendo por 25 $ una comida corrida formada por ejemplo por una sopa napolitana, arroz con plátano frito, bistec, frijoles y café o postre.
Otro buen sitio es el Restaurante Puebla (está casi al otro lado de la calle del Hotel Victoria), el cuál ofrece una buenísima comida corrida por 30 $.
ZONA HISTÓRICA DE PUEBLA (declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en el año 1987).
Aunque México tiene una larga lista de centros históricos coloniales muy interesantes el de Puebla es uno de los mejores, preservando como pocos la impronta española y con más de mil edificios coloniales todavía en uso.
Además, con motivo de ser sede de un congreso mundial de ciudades-patrimonio, Puebla ha llevado a término una campaña de reconstrucción y mejora de su patrimonio colonial.
En la Oficina de Turismo (5 Oriente nº 3) dan información y planos útiles para visitar Puebla y zonas circundantes.
Pasear por cualquiera de las calles del centro histórico es una delicia para los sentidos, pues por todos sitios hay edificios coloniales con magníficos patios interiores, los cuales se pueden visitar sin problema pidiendo el oportuno permiso.
De todos modos destacaremos algunos puntos de interés en Puebla.
En primer lugar tenemos el Zócalo, una bella plaza ajardinada y rodeada por preciosos edificios. En uno de los lados de la plaza tenemos la Casa de Cultura.
En el lado opuesto de la plaza tenemos la Catedral, con los campanarios más altos de México (69 metros), y considerada una de las iglesias más bien proporcionadas del país.
A tres calles de aquí tenemos el Museo Amparo, con un gran fondo de arte prehispánico (la entrada cuesta 16 $).
En la calle 5 de Mayo tenemos la bonita Iglesia de Santo Domingo, que posee en su interior la espectacular Capilla del Rosario, máxima expresión del barroco.
Justo al lado tenemos la Casa-museo José Luis Bello y Zetina (entrada gratuita).
Y otro edificio de obligada visita es la Casa del Alfeñique (esquina 6 Norte con 4 Oriente), una casa del siglo XVIII y que hospeda un museo (el precio de la entrada es de 15 $).
Al lado tenemos el mercado de artesanías El Parián, el Barrio del Artista y el Teatro Principal, uno de los más antiguos de América.
Si desde el centro histórico hemos de ir al CAPU (terminal central de autobuses) es necesario ir a la esquina de las calles 9 Norte y 3 Poniente y tomar cualquier minibús con el cartel 'CAPU' (costa 2.5 $).
Cerro de Guadalupe. Se trata de un parque en un cerro a 2 km del Zócalo. Ofrece unas buenas vistas, tranquilidad y un agradable olor a madera de eucaliptus.
En él hay dos fuertes defensivos, el Fuerte de Loreto y el Fuerte de Guadalupe. Se puede entrar y visitar los dos fuertes militares pero la entrada cuesta 30 $.
Desde el monumento a Ignacio Zaragoza hay una vista excelente de los volcanes La Malinche (4.461 metros) y Pococatépetl (5.452 metros), si no hay nubes que los tapen.
Para llegar a lo alto del cerro de Guadalupe desde el Zócalo se puede hacer andando o bien cogiendo el minibús nº 72 en la Av. 5 de Mayo (2.5 $).
TLAXCALA. Vale la pena dedicar al menos una mañana para visitar esta pequeña y tranquila ciudad 30 km al norte de Puebla.
Tlaxcala también es útil como base para la visita a la zona arqueológica de Cacaxtla.
En el mismo centro histórico de Tlaxcala tenemos la Parroquia de San José, muy bonita con el color amarillo que recubre las paredes exteriores.
Ya en la próxima Plaza de la Constitución o Zócalo tenemos el Palacio de Gobierno, interesantísimo porqué contiene un mural de 430 m2. que explica la historia de Tlaxcala con unos vívidos colores.
Este mural es obra de Desiderio Hernández Xochitiotzin, una figura muy relevante del muralismo mexicano del s. XX.
Atravesando la Plaza Xicohténcatl llegamos al Ex-convento Franciscano de la Asunción, peculiar porque su iglesia tiene un techo de madera de estilo mudéjar.
Saliendo de esta iglesia y bajando por unas escaleras de piedra se llega a la Capilla Abierta, con tres arcos también de estilo mudéjar y ubicada en un entorno muy bucólico.
A 1'5 km andando desde el Zócalo por la calle Juárez y después subiendo por Zitlalpopocatl llegamos al Santuario de la Virgen de Ocotlan (también se puede coger un minibús en la esquina de Guerrero y Independencia),
Esta es una de las iglesias más espectaculares de México, con una fachada del s. XVIII de estilo churrigueresco. El altar y capillas laterales también están muy trabajadas.
Para ir a Tlaxcala desde Puebla hay autobuses con mucha frecuencia que salen de la pequeña terminal que hay en la calle 10 Poniente, entre 11 y 13 Norte (a 1'5 km del Zócalo).
El trayecto cuesta 11 $ y tarda casi una hora por la multitud de paradas intermedias que realiza.
CACAXTLA. Se trata de unas excavaciones, situadas en la cima de una loma en el municipio de Nativitas, con unos frescos bastante bien conservados y de colores vivos. Se cree que Cacaxtla fue la capital del pueblo olmeca-xicallanca.
La parte más interesante es la que se conoce como el Gran Basamento, una plataforma natural con un enorme tejado de metal. Para facilitar la visita y preservar el sitio se ha construido un pasillo de madera que nos va conduciendo por entre los restos arqueológicos, hasta llegar a la zona de los murales, la más interesante.
La entrada al recinto cuesta 35 $. Recientemente esta entrada ha dejado de ser válida para visitar también la vecina zona arqueológica de Xochitécatl, puesto que ahora hay que pagar 30 $ si se desea visitar.
Desde la zona del Gran Basamento se puede ver en una loma próxima la Pirámide Las Flores, la única parte visible de Xochitécatl desde aquí.
Para ir a Cacaxtla desde Tlaxcala es necesario coger un minubús en la calle Guerrero, entre las calles 20 de Noviembre y Díaz, que vaya a Nativitas vía Texoloc. Cuesta 7 $ y al llegar a Nativitas (a 15 km de Tlaxcala) es necesario apearse y esperar otro con destino a San Miguel del Milagro (cuesta 3 $ por hacer un trayecto de unos 3 km), el cual os dejará en un cruce a 500 metros de la entrada de la zona arqueológica o si no lleva más pasajeros es posible que "se enrolle" y os deje en la misma puerta.
Para volver a Puebla se puede bajar desde la entrada a la zona arqueológica de Cacaxtla hasta llegar a la carretera Texmelucan-Nativitas y allá esperar un autobús a Puebla, el cual seguirá la ruta Nativitas-Zacatelco, dejándonos en el CAPU de Puebla. Este trayecto cuesta 12 $ y se hace en unos 45 minutos.
CHOLULA. El principal interés de esta población a 10 km de Puebla es la Pirámide de Tepanapa o Gran Pirámide de Cholula, la más grande del mundo en volumen, con una base de 450 metros y una altura de 65 metros.
Esta pirámide es en realidad una superposición de varias pirámides construidas en diferentes épocas.
En la actualidad, vista desde fuera, cuesta de reconocer que es una pirámide, puesto que es como una pequeña montaña con una iglesia en su cima, la cual construida por los españoles.
La entrada a la zona arqueológica de la pirámide cuesta 30 $.
Se accede por el lado norte de la pirámide y tras atravesarla toda por un largo túnel subterráneo se llega al lado opuesto.
Aquí es donde se encuentran las excavaciones, las cuales dejan ver trozos de los cimientos y de la base de la pirámide, aparte de otros construcciones. En la visita se va siguiendo un camino que bordea el Patio de los Altares o Gran Plaza. A lo largo de este camino hay varios paneles explicativos.
En la esquina nordeste de la pirámide hay un camino que sube hacia la parte superior de la pirámide, hasta la iglesia Nuestra Señora de los Remedios, actualmente en reconstrucción por el terremoto de 1999.
En cualquier caso, desde arriba de la pirámide-montaña hay una magnífica vista de Cholula y sus alrededores, pero sobre todo, y si la climatología lo permite, del impresionante volcán Popocatépetl (5.452 metros).
Aparte de la zona arqueológica de Cholula, también vale la pena dar una vuelta por el Zócalo, con bonitos bares y restaurantes bajo los porches de la plaza.
También podremos ver la Parroquia de San Pedro y, sobre todo, el Ex-convento de San Gabriel, con tres preciosas iglesias: la Capilla Real, de estilo árabe, la Capilla de la Tercera Orden y el Templo de San Gabriel. Todo este conjunto ha sido restaurado recientemente debido al terremoto de 1999.
Para ir a Cholula desde el CAPU de Puebla es necesario dirigirse a un aparcamiento exterior en la terminal y tomar uno de los autobuses con destino a Cholula.
El trayecto cuesta 4 $ y tarda una media hora. Si se pide al conductor nos puede dejar en la misma entrada de la pirámide.
Si se va a Cholula desde el centro histórico de Puebla es necesario ir hasta la parada de autobuses a Cholula que hay en la calle 13 Norte con 6 Poniente.
Y para volver a Puebla se puede coger un autobús directo que sale del cruce de la calle 3 Sur con la 7 Poniente de Cholula. Cuesta 4 $ y tarda unos 20 minutos, dejándonos en la pequeña terminal de autobuses de Cholula mencionada anteriormente.
Desde Puebla hay varios autobuses al día con destino a Oaxaca. Con la compañía ADO el billete cuesta 183 $ mientras que con AU sólo vale 144 $.
Son 312 km y el viaje dura unas 4.5 horas. Si el autobús sigue la autopista 135D tendremos la oportunidad de ver el volcán Orizaba, el más alto de México con sus 5.610 metros, y algunos rincones de Parque Nacional Cañón del Río Blanco.
Pero el paisaje más espectacular lo veremos al entrar en el estado de Oaxaca, tras pasar Teotitlán, puesto que la Sierra Madre de Oaxaca forma aquí un paisaje muy montañoso, de formas redondeadas por la erosión y con una vegetación autóctona formada por arbustos y sobre todo unos cactus muy altos en forma de aguja.
Además hay profundas gargantas formadas por avenidas fluviales. Todo ello muy impresionante por su belleza.
En esta ciudad hay unos cuántos hoteles pero no son especialmente baratos puesto que Oaxaca es muy visitada y hay una alta demanda de plazas hoteleras. Esto quiere decir que en ciertas épocas del año, por ejemplo en Navidad, puede ser difícil encontrar hotel, especialmente que sea adecuado a nuestro presupuesto (bajo, claro!).
La Oficina de Turismo que hay en la esquina de las calles Independencia y García Vigil puede ayudar a buscar uno, ya que que de forma gratuita telefonean a diferentes hoteles de Oaxaca intentando ajustarse al presupuesto indicado.
El Hotel Villa Alta (esquina calle Cabrera con Zaragoza) ofrece una habitación con baño privado por 180 $, pero no podemos recomendarlo porque es muy ruidoso, sobre todo si la habitación da a la calle, y la habitación es bastante pequeña y "cutre" para el precio que tiene.
Sí recomendamos, en cambio, buscar hotel al norte de la calle Independencia, porque es una zona más bonita y también más tranquila. Una de las opciones en esta zona es el Hotel Villa de León, en la calle Reforma y cerca de la iglesia de Santo Domingo, con habitaciones grandes y tranquilas por 240 $. Otra buena opción es el Hotel Santa Clara, en la calle Morelos.
En la Rosticeria Ferri, en la calle Las Casas, se puede comer 1/4 de pollo con ensalada y patatas fritas por 16 $.
Y para desayunar un buen sitio es el Hotel Trébol (esquina de las calles Colón y Flores Magón) ofreciendo por 20 $ un café con leche, zumo natural, y tostadas con mermelada y mantequilla, en un patio interior muy agradable.
OAXACA (oficialmente Oaxaca de Juárez). Es la capital y la ciudad principal del estado de Oaxaca. Está localizada en el valle homónimo de la Sierra Madre del Sur, a una altitud de 1.500 metros.
Existieron diversos asentamientos zapotecas y mixtecas en el área de la actual Oaxaca, siglos antes de la llegada de los españoles, en centros cómo Monte Albán y Mitla. La ciudad colonial, sim embargo, fue fundada en 1532.
Zona histórica (declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en 1987, junto con Monte Albán). Empezamos el recorrido por las plazas adyacentes del Zócalo y Alameda.
La primera de ellas es un buen sitio para sentarse un rato en un banco o en un café y captar la vida de esta bonita ciudad, con limpiabotas, indígenas vendiendo todo tipo de artesanía, etc.
En el lado sur se encuentra el Palacio de Gobierno, con un precioso mural en la escalera que refleja la historia de Oaxaca.
En el lado opuesto, en cambio, tenemos la Catedral.
Cerca del Zócalo también hay otros iglesias con bonitas fachadas: La Compañía y San Juan de Dios.
La cercana calle Alcalá es ideal para pasear ya que es peatonal y ésto permite disfrutar de sus preciosos edificios coloniales.
Y andando por esta calle llegamos a la iglesia más espléndida de Oaxaca, la iglesia de Santo Domingo.
Nada más entrar en esta iglesia, en el techo se puede ver un curioso árbol genealógico de Santo Domingo de Guzmán.
También vale la pena ver la Capilla de la Virgen del Rosario. En el exterior de esta capilla hay una plaza dónde suele haber mucho ambiente.
Hay en la ciudad algunos museos interesantes: el Museo de las Culturas de Oaxaca o el Museo Casa de Juárez.
Además de todo esto recomendamos pasear sin rumbo por las calles de esta zona de la ciudad y ir descubriendo bellos rincones y fachadas de postal.
Oaxaca es una ciudad con una gran vida cultural y esto se nota en la cantidad de exposiciones de pintura y escultura que se pueden encontrar en galerías de arte o simplemente en un café o restaurante.
También curiosos son los nombres antiguos de algunas calles del cenytro histórico, como por ejemplo la Calle de la Desgracia o la Calle del Resbalón.
CONJUNTO ARQUEOLÓGICO DE MONTE ALBÁN (declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO en el año 1987, junto con la zona histórica de Oaxaca).
La zona arqueológica de Monte Albán, con los restos de la antigua capital Zapoteca, está en la cima de una montaña de sólo 400 metros de altura, a unos 8 km del centro de Oaxaca. La entrada al recinto cuesta 35 $.
Ofrece unas vistas espectaculares de los valles que la circundan y de las montañas que delimitan el horizonte.
La zona arqueológica está formada por la Gran Plaza, alrededor de la cual hay un Juego de Pelota, varios edificios, pirámides, Danzantes (figuras talladas en la piedra) y tumbas (actualmente cerradas por restauración).
Todo ello es bastante impresionante y todavía más por su situación estratégica en la cima del cerro con unas vistas excepcionales.
Para ir a Monte Albán parece que la única forma posible de hacerlo es mediante un autobús turístico, comprando el billete de ida y vuelta.
Pero lo peor de todo es que sólo permite visitar el sitio durante dos horas (dicen que es suficiente, pero nosotros hubiéramos preferido poder estar más rato o por lo menos no estar condicionados por una hora de vuelta).
Si uno quiere quedarse más rato debe pagarse un suplemento y no se garantiza que haya plaza disponible en el autobús de vuelta, especialmente sí van muy llenos (!).
En el Hotel Rivera del Ángel (calle Mina con Díaz Ordaz) se encuentra la oficina dónde comprar plazas en los autobuses de Autobuses Turísticos. Hay cada 1/2 hora aproximadamente, tarda unos 35 minutos en llegar hasta Monte Albán y cuesta 20 $, ida y vuelta, saliendo y llegando al mismo hotel.
Otra opción es comprar el trayecto en el Hotel Trébol, pero es más caro, ya que cuesta 30 $. Si se prefiere no ir con el autobús turístico se puede coger un taxi (opción muy cara) o bien ir a pie (opción muy cansada).
Para comprar por avanzado los billetes de autobús sin tener que ir a la terminal de Oaxaca hay que ir a la oficina Ticket Bus que hay en la calle 20 de Noviembre, entre Independencia i Hidalgo.
Des de Oaxaca no hay manera de ir directamente a Taxco de Alarcón (o simplemente Taxco). Es necesario ir vía Puebla o Ciudad de México, pero esta última opción es mejor porque hay una mayor frecuencia de salidas.
Un billete en 1a. clase a la Terminal Tasqueña (terminal sur) de Ciudad de México cuesta 246 $. El autobús se toma en la Terminal de primera clase, en la Calzada Niños Héroes de Chapultepec, y tarda unas 6'5 horas en hacer los 442 km hasta la Terminal Tasqueña de Ciudad de México.
De esta misma terminal salen los autobuses a Taxco. Hay varios al día y cuesta 90 $ en un autobús de lujo, tardando 2'5 horas en hacer el trayecto de 160 km hasta la terminal de autobuses Flecha Roja de Taxco.
Una de las mejores alternativas de alojamiento en Taxco, aunque no es especialmente barata, es la Casa de Huéspedes de Arellano. Una habitación muy grande, con tres camas y baño privado, cuesta 250 $.
El hotel, regentado por una familia, tiene varias terrazas con buenas vistas del pueblo. Es algo difícil de encontrar porque está en medio de los callejones del mercado municipal de Totitlán, pero preguntando no habrá problema.
Otro opción algo más cara es el Hotel Los Arcos, un antiguo monasterio del s. XVII, con un claustro interior precioso y una terraza espectacular. El precio de una habitación, con baño privado, muy espaciosa y con personalidad, es de 350 $ (para hacer un extra!).
El Restaurante Cafetería de la Borda (Plazuela de San Juan, 2) ofrece una excelente comida corrida por 30 $. Sí estamos entre Septiembre y Enero tenemos la oportunidad de probar una "exquisitez" culinaria típica de Taxco que es la salsa de jumil.
El jumil es como un escarabajo, pero más pequeño, que emigra anualmente a estas tierras para reproducirse entre los meses indicados y se ha convertido en un plato típico local. Se pueden comer crudos o fritos, pero la preparación más corriente es en forma de salsa (muy picante, por cierto...).
En el Restaurante Las Antorchas (en la Av. de los Plateros, a 50 metros de la Posada de la Misión) se puede comer una comida corrida por 45 $, junto a un balcón con una magnífica vista del centro de Taxco.
TAXCO DE ALARCÓN (o simplemente Taxco) es uno de los sitios más pintorescos y tranquilos de México. Esta ciudad está ubicada en la parte norte del estado de Guerrerro, desperdigada por la ladera de una montaña, y con un aire colonial maravilloso, recordando en cierto modo los pueblos blancos de la Alpujarra de Granada.
Taxco fue declarado monumento histórico-nacional y las autoridades locales intentan preservar el legado arquitectónico colonial, forzando a las nuevas construcciones a seguir el mismo estilo y usar los mismos materiales (sólo es necesario fijarse en la gasolinera de estilo colonial que hay en la entrada del pueblo.
Por su orografía es difícil encontrar una calle plana y es muy divertido ver una hilera de taxis escarabajo (VW Beetle) subiendo y bajando por las calles estrechas de Taxco.
En la Plaza Borda o Zócalo tenemos el Templo de Santa Prisca, una iglesia de piedra rosada que es un tesoro de la arquitectura barroca. Tanto en la fachada como el interior podemos apreciar elementos de estilo churrigueresco.
Cualquier calle de esta zona es buena para perderse por los rincones y vistas que descubriremos a cada paso.
Andando por la bonita calle Benito Juárez y después por la calle El Chorrillo en dirección al teleférico de Taxco se llega a la Hacienda El Chorrillo (actualmente un centro de enseñanza para extranjeros de la Universidad Nacional de México, aunque en el pasado fue un hotel de lujo con huéspedes ilustres). Pidiendo permiso a algún responsable del lugar se puede visitar esta preciosa casa, en un bonito en torno de jardines y árboles.
Bajando un poco más por la misma calle accedemos al teleférico que sube al lujoso Hotel Monte Taxco, en la cima de una loma. El interés no es ir al hotel en sí, sino las magníficas vistas de Taxco y las montañas vecinas que se pueden ver des de allá.
El viaje de ida y vuelta en el teleférico cuesta 30 $.
La Posada de la Misión, además de ser uno de los hoteles más lujosos y más bonitos de Taxco, merece una visita para ver el mural de Juan O'Gorman.
Este estupendo mural, que versa sobre el emperador Cuauhtémoc, está situado en la zona de la piscina, dónde también hay una terraza en mitad de un entorno muy cuidado, tranquilo, y con unas maravillosas vistas de Taxco.
Y por último, dado que Taxco tuvo en el pasado unas importantes minas de plata ahora se encuentran infinidad de tiendas dónde comprar plata.
Por ejemplo, en el mercado de Totitlán y junto a la Casa de Huéspedes Arellano se encuentra el Mercado Artesanías Plata.
De la terminal de autobuses Flecha Roja de Taxco salen numerosos autobuses a Cuernavaca.
Cuestan 39 $ en segunda clase y tardan unos 85 minutos en hacer el trayecto de 70 km hasta la terminal Flecha Roja de la Avenida Morelos de Cuernavaca.
CUERNAVACA. Es la capital del estado de Morelos y está situada a 85 km al sur de la ciudad de México. Se la conoce con el sobrenombre de la "ciudad de la eterna primavera" gracias a las temperaturas suaves que tiene a lo largo de todo el año.
También aquí la Plaza de Armas o Zócalo es el inicio de nuestro recorrido. Como curiosidad apuntar que esta es la única plaza central de México que no tiene ninguna iglesia o catedral alrededor.
Justo al lado de la esquina nordeste se encuentra el pequeño Jardín Juárez, el cual tiene en su centro una glorieta diseñada por el ingeniero francés Gustave Eiffel.
Al sudeste de la Plaza de Armas destaca el impresionante Palacio de Cortés, una fortaleza de estilo medieval que fue contruida sobre la base de una pirámide que el propio Hernán Cortés había destruido.
Ahora en el interior de este palacio se encuentra el Museo de Cuauhnáhuac y es visitable (aunque nosotros no lo pudimos hacer debido a que estaba cerrado por ser el día de Año Nuevo).
No demasiado lejos de aquí, en la esquina de la Av. Morelos con la calle Rayón, está la entrada al Jardín Borda, un conjunto de edificios y zonas ajardinadas que permiten hacerse una idea de como vivía en el pasado la aristocracia mexicana (aquí vivieron, por ejemplo, el emperador Maximiliano y la emperatriz Carlota).
Muy cerca de aquí se encuentra el Recinto de la Catedral, en la esquina de la Av. Morelos y la calle Hidalgo, aun cuando la entrada está en la calle Hidalgo. Todo el conjunto también tiene un estilo de fortaleza de grandes proporciones. Al entrar en el recinto encontramos a la derecha el Templo de la Tercera Orden de San Francisco y a la izquierda la Capilla del Carmen.
Más adelante hay unos jardines que van flanqueando el camino de entrada hasta encontrar a la derecha la Capilla Abierta de San José y enfrente mismo la propia catedral, el Templo de la Asunción de María.
Si nos fijamos en la fachada sobre la puerta de entrada al templo veremos unas imágenes que son una mezcla de elementos indígenas y europeos (se puede ver una calavera y unos huesos cruzados que aquí son más un símbolo de la orden franciscana que de los piratas tal como salen en las películas de bucaneros).
Dedicamos la mañana a visitar Cuernavaca, pero a mediodía ya debemos empezar a volver a Ciudad de México porque tenemos el vuelo de vuelta a casa al anochecer. Desde Cuernavaca hay cada hora autobuses directos al aeropuerto de Ciudad de México.
Para comprar los billetes y coger el autobús se ha de ir a la terminal Pullman de Morelos de Casino de la Selva, puesto que en la oficina Pullman de Morelos que hay en el centro no se venden billetes para el mismo día.
Este autobús al aeropuerto cuesta 85 $ y tarda unos 90 minutos. Para llegar hasta la terminal de Casino de la Selva debe irse a la calle Guerrero y coger un minubús que vaya hasta allí (preguntar al conductor), costando 3'5 $ el trayecto. En esta terminal no hay servicio de consigna.
Pero dado que aún teníamos algo de tiempo, decidimos no ir directamente al aeropuerto sino coger un autobús a la Terminal Tasqueña de Ciudad de México, desde allá ir y estar un rato por el cercano barrio de Coyoacán.
Y desde aquí tomamos el metro para llegar al aeropuerto (desde las terminales de autobuses de Ciudad de México no hay autobuses directos al aeropuerto).
En la misma terminal Pullman de Morelos de Casino de la Selva (en Cuernavaca) compramos los billetes de autobús Cuernavaca-Terminal Tasqueña de Ciudad de México por 47 $. El trayecto es de 90 km y dura sólo 65 minutos.
Una vez llegamos a la Terminal Tasqueña (terminal sur) salimos fuera y tomamos un pesero (minibús) de la Ruta 1 en la esquina con Av. Tasqueña y que nos deja en la esquina de la Av. de Quevedo con la calle Carrillo Puerto (cuesta 2 $ el trayecto).
Subimos andando por la calle Carrillo Puerto dirección a Plaza Hidalgo y, tras hacer las últimas compras en el Bazar Artesanal de Coyoacán, iniciamos la ida hacia aeropuerto.
Primero cogemos un pesero hasta la estación de metro 'Gral. Anaya' (2 $), y allá tomamos la línea 2 de metro en dirección a Cuatro Caminos, bajando en 'Hidalgo'.
Hacemos transbordo para tomar la línea 3 en dirección a Indios Verdes y volver a bajar en la estación 'La Raza', haciendo un último transbordo para coger la línea 5 dirección Pantitlán y bajar finalmente en la estación 'Terminal Aérea'.
Al salir del metro y entrar en el edificio de la terminal es necesario atravesar un montón de salas antes de llegar a la zona de salidas internacionales.
Por último, recordar que al facturar deben pagarse unas tasas de salida equivalentes a unos 17 US$, a no ser que en vuestro billete de avión veáis impresas en algún sitio las letras XD, lo cual os indicará que ya las habéis pagado al comprar el billete de avión.
That's all, folks !!!