¿Alguna vez os habéis preguntado qué pasa con nuestro equipaje una vez lo perdemos de vista en la cinta del mostrador de facturación hasta que llega al avión o bien en el camino inverso, desde que sale de la bodega del avión hasta que es depositado en la cinta de la sala de equipajes?
Si es así no te pierdas este espectacular vídeo publicado en la web del aeropuerto Schiphol de Ámsterdam.
En este vídeo se muestra el largo y curioso viaje de una maleta cualquiera desde que es descargada del avión hasta que llega a la cinta correspondiente en la sala de equipajes para ser recogida por su dueño/a.
Por supuesto esto que vemos aquí no es lo habitual en la mayoría de aeropuertos del mundo, donde muchas veces todo se reduce a una tarea manual por parte de operarios que cargan el equipaje en un carro para luego lanzarlo a una ruidosa cinta transportadora que lo conduce a duras penas hasta la sala de equipajes.
Pero en el aeropuerto de Schiphol, uno de los hubs con más tráfico de pasajeros de todo el mundo, según vemos en el vídeo, el equipaje se embarca en un viaje por una auténtica montaña rusa compuesta por cintas transportadoras, ascensores, brazos robotizados y plataformas basculantes en las entrañas de un gran laberinto, automatizado.
Vista la complejidad de la tecnología utilizada en la logística del equipaje en el aeropuerto de Schiphol parece increíble que nuestras maletas y mochilas acaben finalmente en el lugar correcto.
De hecho, el aeropuerto de Schiphol gestiona anualmente unos 50 millones de piezas de equipaje, teniendo actualmente la capacidad de llegar hasta los 70 millones. En días de mucho tráfico aeroportuario en Schiphol se puede mover 160.000 piezas de equipaje por día.
Su red de transporte de equipajes está compuesta por 21 km de cintas transportadoras y 5 km de raíles. Con todo, la distancia más larga que una maleta puede viajar por las entrañas de Schipol es de 2,5 kilómetros.
Pero a pesar de este gran nivel de automatización en el aeropuerto de Schipol, son casi 2.000 empleados los que se ocupan de que el equipaje jamás se extravíe.
Para tener otras perspectivas podéis ver este vídeo 360º interactvo publicado en la web del aeropuerto de Schiphol.